Santiago, Chile.- Por razones obvias, de un tiempo a esta parte me he aficionado a realizar pequeños análisis sobre los videos más recientes que, en lo personal me mueven. Creo que todos tenemos, en el fondo, una esencia similar, por lo que si me impactan de alguna forma, también le sucederá a otras personas. Entonces vuelvo al punto- tan femenino, dicen algunos- de la importancia que tiene la emoción en publicidad. Si logramos identificar al público con una emoción, el trabajo ya es un éxito.
El primer comercial que comparto con ustedes es el de Samsung Galaxy 4, realizado por AB/BC/CD. El colectivo trabajó imágenes muy simples, pero comenzó acertando con el primer concepto/slogan “La vida está en las cosas pequeñas”, con el subtexto latente de algo como que podemos registrar con este dispositivo, obvio. Las imágenes son hermosas, la música es perfecta y aunque claramente el comercial está dirigido al público joven, el todo logra una suerte de identificación general innegable. Bonito.
General Electric, a través de la agencia BBDO Nueva York ha estado asociando la imagen de la empresa con la cultura pop. Antes fue The Matrix- con un exitoso comercial que mencionamos en su oportunidad- y ahora sigue en la misma línea con otro gran tema: Star Trek.
Se trata de un guiño a los millones de fanáticos de la antigua serie que tuvo sus primeras emisiones en… ¡1966! y que, con los años, se ha convertido en una pieza de culto. Además de la excelente producción en términos de factura, la nueva imagen del Enterprise genera algo especial que tiene que ver con la inmersión profunda en las nuevas tecnologías. Creo que mueve a niños y adultos. La idea de ciencia ficción – que ya no es tal- siempre lo hace.
Sigo pensando que todo lo que logre emocionarnos habrá traspasado la barrera del comercio, para internarse en el ámbito de la cercanía afectiva con el producto