Brasil, México y Argentina son los tres mayores fabricantes de automóviles de Latinoamérica, el resto de los países de la región están muy por debajo en cantidad de unidades producidas.
México produjo en 2016 3,47 millones de unidades, Brasil fabricó 2,15 millones y Argentina, 472 mil.
Es por esto, y porque entre los tres existen acuerdos de libre comercio de vehículos, que es interesante la comparación entre las condiciones de fabricación, datos que luego determinan que las terminales automotrices se radiquen en uno u otro país.
Según un informe de Adefa, la entidad que agrupa a las fabricantes de autos radicadas en Argentina, ensamblar un vehículo en este país es hasta un 65% más costoso que hacerlo en Brasil y México. El estudio fue elaborado por Bain & Company y publicado esta semana por periódico Ámbito Financiero.
En la investigación de mercados, por ejemplo, se comparan, entre otros factores, cuántos autos produce por cada operario en promedio y cómo impactan las cargas sociales y los impuestos. Estos son algunos de los resultados.
- Productividad. En México, se fabrica en promedio 40,2 autos por operario, en Brasil 21,2 y en Argentina 18. Esto implica que Brasil tiene una productividad 17% mayor que Argentina y que México la mejora un 120%.
- Precios. Los vehículos 0 km en la Argentina son, en promedio, 25% más caros que en Brasil y 60% más que en México.
- Salarios. El salario promedio que se paga en Argentina en las fábricas de autos es 41% más alto que en Brasil y 85% superior a México.
- Costo de fabricación. Un vehículo en la Argentina es 25% más caro de producir que en Brasil y 65% más que en México.
- Impuestos. Uno de los mayores problemas en Argentina son los impuestos. Por ejemplo, si se analiza un modelo que se comercialice al público a US$ 22 mi, en la Argentina paga en concepto de impuestos US$ 2.600 (entre Ingresos Brutos, tasas, impuestos a créditos y débito), más IVA (Impuesto al Valor Agregado). En Brasil, US$ 2.200 (más IVA) y en México sólo tributa IVA.
- Diferencia. En la Argentina, el 63% de la presión tributaria afecta al proceso productivo y el 37%, a la comercialización. En Brasil, el 39% de los impuestos se aplica en el proceso productivo y el 61% durante la comercialización. En México, no se grava a la producción y la comercialización sólo tributa IVA.
- Dólar y cargas sociales. Por cada dólar que se paga de salario, en la Argentina el 53% corresponde a cargas sociales. En Brasil, este rubro representa 46% y en México, 27%.