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México se habría colocado como el segundo país de la OCDE en estabilización económica, según un comunicado de prensa de la Presidencia de la República.
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En tercer lugar bajo el indicador CLI se encuentra Sudáfrica, con 100.3 puntos, seguido por Japón, con 100.2; Islandia, con 99.9; Eslovenia, con 99.7; e India, con 99.6.
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Pese a esos datos, un 31 por ciento de los hogares mexicanos considera que este año que cierra su economía empeoró, lo que los hace temerosos de lo que viene para 2023.
Pese a que el Gobierno de México presumió cerrar el año con una economía de las más sólidas de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), los mexicanos siguen sin la certeza de lo que pasará en 2023, pues muchos consideran que su ingreso familiar empeoró en 2022.
Fue a través de Twitter que la Presidencia encabezada por Andrés Manuel López Obrador (AMLO) afirmó que México se había convertido en una de las economías más estables este año, pues reportó 100.6 puntos en el Indicador Principal Compuesto (CLI, en inglés) de la OCDE, cifra que fue sólo superada por Irlanda, que registró 101.4 puntos hasta noviembre de 2022.
Mientras que las grandes economías pierden impulso, la de México mantiene un crecimiento estable para los próximos meses según el índice de los principales indicadores compuestos de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico, #OCDE, una vez que en noviembre…
— Gobierno de México (@GobiernoMX) December 26, 2022
El Gobierno mexicano destacó que México se colocó en el segundo lugar con este indicador, lo que da mayor fuerza que la que presentaron países como Alemania, Italia, Japón, Estados Unidos, Francia, Canadá y Reino Unido.
Asimismo, el indicador CLI para los puntos de inflexión económica del año que viene, la OCDE prevé una desaceleración del 2.5 por ciento del PIB real en México al acabar 2022 y una baja en inflación a 5.7 por ciento en 2023 y 3.3 por ciento en 2024, según las perspectivas económicas publicadas en noviembre.
Mexicanos no extrañarán economía de 2022
Pese a los estándares positivos del Presidente, tres de cada diez mexicanos no ven en sus bolsillos la estabilidad económica de la que presume el país; de hecho, el 31 por ciento de los hogares considera que este año su economía empeoró.
De acuerdo con un reciente estudio de la consultora Kantar, 5 por ciento más de las personas con pesimismo financiero se reportaron al cierre de 2022, con percepciones inciertas y temerosas de su gasto en 2023.
Y es que sólo un 22 por ciento de los encuestados declaró tener una visión positiva de la situación económica que atraviesa México, mientras que el 20 por ciento sólo puede decir que el panorama se mantuvo estable o igual que el año pasado.
En cambio, el 27 por ciento de los hogares no tiene claro si la economía avanzó o no en 2022 y el 31 por ciento está segura de que los resultados no fueron buenos.
“Este año, la inflación que el país ha alcanzado es tema de referencia para las familias mexicanas, la mayoría no tiene certeza de qué es lo que pasará en los próximos meses, aunque algunos prefieren ser realistas y pensar que la situación seguirá como hasta ahora o probablemente se complique más”, firma la gerente de estudios especiales de la división Worldpanel de Kantar México, Stephanie Del Razo.
Asimismo, la firma asegura que, de cara a 2023, el escenario que se construye para 2024 es inquietante en un panorama que busca la recuperación económica, aunque se prevé que la desaceleración de Estados Unidos impacte directamente a México.
Esto sumado a que continuarán aumentando los precios en productos de consumo masivo, según las expectativas de inflación de Banxico, que dictan que para el primer trimestre de 2023 serán de 7.5 por ciento, es decir, lejos de regresar a los niveles prepandemia.
“Con el aumento de precios, han tenido que utilizar lo que tenían guardado y esto se ve en los volúmenes que se están comprando, en cada viaje el comprador se adapta, por lo que es crucial opciones adecuadas a cada misión de compra”.
“En el caso de compras medianas y premium funcionan mejor las presentaciones pequeñas, ya que no se quiere dejar de consumir la categoría o producto. Cabe mencionar que las ventas a granel seguirán jugando un rol importante dentro del gasto para 2023”, dice el estudio.
Así, con “ambos lados de la moneda”, podremos ver cómo aumenta o decrece el uso de tarjetas de crédito y débito, si los ahorros familiares se agotan en 2023 o las familias optan por hacer un cambio de menor intensidad en sus compras.
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