De los clientes que el servicio de transporte bajo demanda, Uber, tiene en los países hispanoparlantes, los mexicanos son los más distraídos, así lo detalló la empresa a través de un comunicado; en la misiva, la compañía precisó que seis de cada diez objetos perdidos en viajes ordenados desde la aplicación son en el país.
Dentro de la lista de los 28 mil objetos olvidados, reportados, hay prácticamente de todo, desde los habituales celulares, carteras, bolsos, mochilas y cargadores; hasta llantas, ollas de tamales, así como un bebé. Según múltiples reportes de prensa, en Coahuila una pareja dejó al recién nacido en un auto, el conductor se dio cuenta unas cuadras después y regresó al destino para hacer entrega del bebé. Esto ocurrió durante diciembre de 2017.
Otro de los objetos que llamó la atención fue un vestido de novia, una máquina para hacer hielo; una pantalla de 55 pulgadas; una bata de baño; una biblia negra; un juguete sexual; boletos para un concierto, entre otras pertenencias.
De igual forma, la compañía indicó que los usuarios que han dejado objetos en el auto de su conductor puede pedir por la aplicación que se los regresen. Sobre este aspecto, la situación se ha ido mejorando ya que en la actualidad el 93 por ciento de las pertenencias reportadas como olvidadas son recuperadas y devueltas a su dueño, a su vez, y como forma de compensación se debe pagar un cargo por 80 pesos al conductor por el tiempo perdido.
Este patrón de conducta, reflejado por la misma empresa, refiere que uno de los aspectos en los que se debe centrar Uber en cuanto a su atención al cliente en el territorio nacional tiene que ver más con el área de objetos olvidados, que en otras aristas propias del servicio.
Entender que este aspecto es una prioridad representa un punto positivo desde la perspectiva del colectivo ya que se sienten con mayor confianza de utilizar este sistema de transporte, con tanta seguridad, que no somos precavidos con los objetos con que viajamos.