Empecemos por el principio: en 2020, la Unión Europea, a través de su máximo tribunal, le ordenó a todas las tecnológicas fuera de esa región, Facebook incluida, que el sistema de transferencia de datos que usan entre los servidores de Estados Unidos y Europa no es válido y que deben establecer uno nuevo que no comprometa la seguridad de los datos de las personas. La sentencia fue reconocida como “Schrems II“.
La novedad es que Meta, en un documento llevado a la Securities and Exchange Commission (SEC) de los Estados Unidos, dice que la sentencia en Europa es un problema para sus redes sociales y que puede comprometer el funcionamiento de Facebook e Instagram en aquella región.
Es decir, le dice algo así como: cumplir con Schrems II no es posible, para hacerlo, deberíamos “cerrar” Facebook e Instagram en Europa. ¿Quieren eso?
En el texto ante la SEC, Meta acentúa la relevancia de Privacy Shield, el escudo de privacidad que es el foco del problema y que es el que hoy se usa para transferir la información de los usuarios de la Unión Europea a los Estados Unidos. En rigor, lo hace desde todas partes del mundo, incluida América Latina, hacia sus servidores centrales.
Meta también dice que otros protocolos que utiliza para la transferencia de datos, como las llamadas cláusulas contractuales estándar, han sido revisadas y aprobadas en instancias judiciales previas.
Facebook dice en la presentación ante la SEC: “Si no se adopta un nuevo marco para las transferencias transatlánticas de información y no podemos continuar utilizando las cláusulas contractuales estándar u otras maneras alternativas de transferencia de información desde la UE a los EE.UU., es posible que no sea posible seguir ofreciendo varios de nuestros productos y servicios más relevantes, como Facebook e Instagram, en Europa”.
Y agrega: esto “afectaría de manera negativa nuestros negocios, nuestra situación financiera y los resultados de las operaciones”.
Por qué Facebook insiste en enviar los datos desde Europa a Estados Unidos: publicidad
En la presentación ante la SEC, Facebook deja en claro que el problema de las restricciones impuestas por Europa tiene relación con la publicidad y la orientación de los anuncios.
“Si no nos es posible hacer la transferencia de datos entre países y regiones en los que estamos operando con nuestras redes sociales o si se restringe la posibilidad de compartir información entre nuestros productos y servicios, esto va a afectar nuestras capacidades para prestar servicio y a nuestras capacidades para orientar los anuncios publicitarios, lo que impactará de forma negativa en nuestros resultados financieros”, explica muy claramente Meta.
Meta no está sola en esto.
El mes pasado, la autoridad de protección de datos de Austria, dictaminó que Google Analytics funciona de manera ilegal en ese país porque infringe las normas de transferencia de datos entre la UE y EE.UU.