Los delanteros de Barcelona y de sus respectivas selecciones, Lionel Messi y Luis Suárez, comenzaron este jueves una campaña en favor de que Argentina y Uruguay organicen de forma conjunta el Mundial 2030. Además, se conoció que Paraguay también será parte del proyecto para que el evento de los 100 años de la Copa del Mundo sea en Sudamérica.
Antes del comienzo del partido de las Eliminatorias Sudamericanas entre Uruguay y Argentina en Montevideo (que finalizó 0-0), Suárez se colocó una playera de Uruguay con el número 20 y Messi una de Argentina con el 30. Ambos, uno al lado del otro, formaron el 2030, año en el que pretenden organizar el evento.
Luis Suárez ?? y Lionel Messi ?? promocionaron a Uruguay y Argentina como sedes del Mundial 2030. pic.twitter.com/apMVbcnHSx
— Walter Queijeiro (@wqueijeiro) 31 de agosto de 2017
Hay que recordar que Uruguay organizó el primer Mundial, allá por 1930, y Argentina lo hizo en 1978. Ambos conjuntos locales obtuvieron la copa en dichos eventos.
Por otra parte, también este jueves se confirmó que Paraguay se sumó a la dupla organizativa, por lo que serán tres las potenciales sedes, si es que la Fifa lo habilita. Hasta ahora, están confirmadas las sedes de Rusia 2018 y Catar 2022. Faltan definir las de 2026 y 2030.
Confirmo que ya estamos de acuerdo los Presidentes de #Paraguay #Argentina y #Uruguay para pelear la candidatura del Mundial de Fútbol 2030
— Horacio_Cartes (@Horacio_Cartes) 31 de agosto de 2017
La idea de que Argentina, Uruguay y Paraguay organicen la Copa en 2030 es una iniciativa similar a la que impulsan México, Estados Unidos y Canadá para 2026.
Desde la Conmebol se informó que la idea es reunir a los presidentes de los tres países involucrados (Tabaré Vázquez, Mauricio Macri y Horacio Cartés) para anunciar y formalizar la candidatura conjunta.
La acción fue parte de una idea de Mercado McCann para Iniciativa 2030, un grupo binacional de empresas e instituciones que impulsan la postulación de estos países para ser sede de la Copa del Mundo 2030.
¿Se gana dinero con un Mundial?
Según Stefan Szymanski, coautor del libro Soccernomics, “la mayoría de las evidencias sugieren que los beneficios económicos para el país organizador son insignificantes”. Según publicó Apertura, “el economista y profesor de Management Deportivo en la Universidad de Michigan resalta que la clave estará en no invertir en instalaciones que tengan un limitado uso práctico después del evento”.
En paralelo, el Instituto Alemán de Investigación Económica de Berlín publicó un informe en el que afirma que “el impacto económico, tanto para el país anfitrión de la Copa del Mundo 2006 como para Brasil en 2014, fue nulo”.
El mayor problema es que la Fifa exige tantos requisitos que demandan mucha inversión y que luego del evento quedan en desuso. Hasta ahora, demanda 12 estadios con una capacidad mínima para 40 mil personas y un estadio para 80 mil. “Además de las inversiones en telecomunicaciones, transporte y capacidad hotelera para 60 mil personas, la FIFA también solicita un total de 64 campos de entrenamiento de primer nivel”, dice Apertura.
El problema es que esas exigencias son para los mundiales de 2018 y 2020, pero como para 2026 serán 48 las selecciones participantes (en lugar de 32), la inversión será mayor.
Un caso paradigmático de infraestructura sin uso es el estadio de Manaos, en Brasil, que costó US$ 300 millones y hoy está sin uso.
Presupuestos para organizar la Copa del Mundo (Fuente: BBC)
- Alemania 2006: US$ 2.000 millones
- Sudáfrica 2010: US$ 6.000 millones
- Brasil 2014: US$ 10.600 millones
