Aunque soy producto de una familia disfuncional y desintegrada tengo herencias y programaciones culturales también. Y por lo mismo soy capaz de entender que el rol de las nuevas familias, las madres y lo padres ha cambiado.
Nuevos roles, nuevas tribus de padres
Las mujeres ya no se conforman con ser sólo amas de casa. Tienen ya una inspiración más emprendedora y hambre de un desarrollo profesional en sus vidas. Esto no implica que a las nuevas mujeres las motive estar encerradas en una oficina de nueve a seis. La tecnología les da la facilidad de trabajar desde su casa, se empoderan con nuevas herramientas digitales para hacer más, en menos tiempo con mayores alcances.
Por otro lado, el rol del nuevo hombre ha evolucionado. Es más sensible, llora más y no teme expresar sus auténticas emociones. Se involucra de manera más participativa en la vida de sus hijos y también los deja entrar en su vida profesional. Recuerdo que en mi generación, los padres de familia eran unos personajes que llegaban muy tarde a las casas, quizá por la noche, gruñones y reprendían a quien había tenido un mal comportamiento durante el día. Eran una espacie de refrigeradores proveedores de comida, dinero y recursos. Sí, igual de fríos que un refrigerador. Se hablaba con la madre y se le pedía dinero al padre. Tengo un recuerdo vago de un video de agradecimiento que vi hace poco, de una hija de treinta y tantos a su padre, que era una recopilación histórica de todo los regalos que la había dado en su vida. Esto me pareció muy triste.
En lugar de mostrar momentos, aprendizajes o experiencias vividas interesantes, el video recurrió a ser un catálogo de regalos pasados y presentes. Como si los padres fuésemos sólo unos proveedores de regalos materiales, más allá de experiencia y amor que nos gusta compartir.
Actualmente, existe una nueva tendencia de hombres cuarentones que son padres por primera vez. Es una ola mundial y responde a nuevas programaciones culturales, tecnológicas y de nueva identidad. Los hombres que hoy están entre los cuarenta y cincuenta, están necesitados de experiencias offline reales y auténticas. Quien mejor que una nueva paternidad para vivirlas. Muchos de ellos, ahora tienen más tiempo y recursos para involucrarse en la vida digital y offline de sus hijos y nuevas familias. Meterse de lleno en su educación y en la crianza. Esto les genera sentirse más vivos y reales. Inyecta más compromiso y da la oportunidad de heredar un legado ideológico y material para los que van a vivir más que ellos. Los nuevos padres hoy, están más cerca de sus hijos más vinculados y esto les da un sentido mayor de acercamiento a sus hijos. Se sienten más involucrados al núcleo familiar, no sólo dando dinero y siendo proveedores, también educando con tiempo y experiencias.
¿Cómo es un nuevo padre hoy y su tendencia?
- Tiene más inseguridades y menor autoestima.
- No sólo quiere ser un proveedor más, quiere vivir más experiencias auténticas con su familia nuclear. Fuera del mundo online.
- Siente temor por saber qué encontraran sus hijos en su vida digital y entorno.
- Le encanta ver que su hijos expresan sus sentimientos reales, más allá de su masculinidad. La nueva masculinidad no está peleada con expresar lo que siente, con reír o llorar pro algo que nos conmueva.
- Los nuevos padres hombres quieren divertirse con sus hijos, ser sus aliados y mejores amigos. No unos sargentos formadores de legiones de soldados acartonados e insensibles.