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“BoF Insights from The Business of Fashion” es un estudio que explica lo valioso de la moda, probando nuevas estrategias.
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McDonald’s es de las marcas más valiosas en fast food, según Brand Finance.
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La acción de upcycling de McDonald’s es una interesante medida de aprovechamiento de los recursos a la mano del consumidor.
Una estrategia de upcycling, predominante en apparel, llevó a McDonald’s a implementar una importante acción de venta de ropa, la cual parte de la reutilización de sus viejos uniformes, pues una marca de moda que los recicla ha dado con un acierto en diseño.
La ocurrencia de la cadena de comida rápida llega en un momento en que el fast fashion acumula críticas por las prácticas masivas que se implementan en este segmento, en que por la contaminación que generan se ha convenido en desarrollar prácticas cada vez más audaces, como ocurrió con H&M, cuando la cadena de ropa sueca instaló en una de sus tiendas en Estocolmo a Loop, un robot que descompone prendas usadas en fibras, para poder confeccionar telas y a partir de estas telas armar prendas nuevas.
La medida tecnológica es una de las respuestas más importantes que se han hecho en materia tecnológica para atender el tema de la contaminación a través de la ropa, ya que ayuda a reconvertir viejas piezas, la cual es una de las tantas medidas que se tienen a la mano, tal como veremos con McDonald’s.
Este fenómeno es parte de las nuevas colaboraciones en las que trabajan las marcas de moda, que están dispuestas a tomar nuevos proyectos más allá de lo tradicional como vender prendas bajo determinados métodos, como confeccionar ropa y exhibirla en una vitrina esperando su venta. Dentro del estudio “BoF Insights from The Business of Fashion” se concluye que de las tres principales metas que persiguen las marcas de moda para probar nuevas cosas, el 46 por ciento lo hace porque eso le beneficiará en relaciones públicas.
La ropa vieja de McDonald’s
McDonald’s ha anunciado su colaboración con una pequeña firma de diseño de ropa llamada Vain, la cual se encuentra en Helsinki, donde contó con el apoyo de la famosa cadena de comida rápida, que a decir de Brand Finance es de las marcas más famosas de fast food.
Entre Vain y McDonald’s se llevó a cabo una colaboración de upcycling, donde la marca de comida le daba uniformes viejos y Vain confeccionaba prendas a partir de estos materiales.
Como parte de esta estrategia, el diseño elevó la simpleza de los uniformes y ya en prendas confeccionadas logró un producto de valor y visualmente atractivo, en vestidos, hoodies y minifaldas.
“Las prendas se diseñaron buscando nuevas formas de utilizar la ropa de trabajo desgastada y de crear nuevos diseños utilizando materiales ya existentes”, cita parte del comunicado de Vain sobre esta importante colaboración.
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Esta no es la primera vez que una enorme marca colabora con una marca independiente de moda, para lograr prendas destacables, Michelob lo hizo en México colaborando con los Hermanos Karamazoto, como parte de su campaña Movement Live. De dicha colaboración resultaron prendas de muy alta calidad por el gramaje de las telas de algodón usadas, pero principalmente por el diseño con que cuentan las piezas entregadas.
Hay un alejamiento loable cada vez más entre el merchandising de una marca, no importa que se trate de una firma de comida rápida que vende hamburguesas o una cerveza que podemos comprar en el Oxxo, lo importante de estas acciones es que se buscan alternativas cada vez más valiosas en diseño de moda, que ayuden a que la experiencia con la marca se enaltezca más allá de lo ordinario que puede resultar morder unas papas fritas o sorber cerveza de una lata.
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