Internacional.- En los últimos años las ventas de las grandes cadenas de comida rápida se han visto severamente afectadas no sólo por los cambios en los hábitos alimenticios de los consumidores, quienes cada vez buscan opciones más sanas de comer, sino por la cada vez mayor competencia que existe en el mercado, y aunque las afectaciones se han dado de manera generalizada, hay algunas marcas que han sabido disminuir de mejor manera el impacto negativo.
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Pese a que McDonald’s ha realizado una gran inversión para revertir la imagen negativa que el consumidor tiene de la marca a través de varias estrategias de marketing como la costumización de sus hamburguesas, campañas de sustentabilidad o tropicalización de algunos de sus productos; ninguna de éstas ha tenido un impacto positivo en las ventas, las cuales sufrieron una caída del 3.3 por ciento a nivel global en el último trimestre de acuerdo con cifras de Bloomberg.
Por el otro lado, Burger King ha experimentado un crecimiento de 2.4 por ciento a nivel mundial, pues al contrario de su competidor quien se ha mostrado más preocupado por demostrar cuan buenos son, ellos han puesto su atención en su mercancía, lanzando al mercado productos más relevantes para el consumidor.
Y si bien es cierto que cada una de las franquicias de McDonald’s genera más del doble de dinero que las de Burger King (2.6 millones contra 1.2 millones de dólares al año de acuerdo con Carrols Restaurant Group), debemos destacar que en este negocio lo importante es mejorar constantemente, situación que McDonald’s no está logrando, al menos no según lo que informan los números.
