Hoy en día resulta difícil destacarse ante la proliferación de blogs, sitios web y redes sociales que inundan Internet, lo que hace complicado resaltar entre tanta competencia. Más aun cuando no se tiene mucha idea sobre como mostrar a los posibles anunciantes las cualidades del contenido que un nuevo negocio ofrece, esperando mejorar las posibilidades de renta con el sistema que se implementa, tal como el marketing relacional.
Es un hecho que la navegación digital ha propiciado nuevas formas de acción para la mercadotecnia. Según Arab Marketing Innovation, hace tres años el uno por ciento del gasto publicitario se centró en el marketing digital, pero esta cifra crecerá hasta un 18 por ciento en este año y se prevé su menos un 30 por ciento para el año 2018.
A pesar de lo anterior, adaptarse a las tácticas tradicionales puede ser una opción en el camino digital. Algo que se puede utilizar de forma eficaz es el marketing de relaciones, pues funciona como un concepto que nace a partir de un cambio en la orientación estratégica para captar clientes y dejarlos satisfechos, en cuanto la variable de productos y servicios que se promueven.
Así, se podría decir que el marketing relacional es el proceso que integra al servicio al cliente con la calidad y el marketing. Business Insider considera que la inteligencia artificial, la realidad aumentada y virtual y el contenido patrocinado ayudarán a propulsar el crecimiento de los anuncios digitales en la próxima década y si se traduce a la adaptabilidad de otras estrategias, la proyección será mayor.
Aplicar el termino en una estrategia digital puede basarse en la idea de llegar a la meta de construir relaciones a largo plazo con los clientes, realizando un intercambio de propuestas con base en lo que se escucha de acuerdo a su feedback en redes sociales, sobre todo si se piensa que Facebook, Twitter, Instagram incluso Tumblr acaparan los 2,330 millones de usuarios en plataformas digitales.
En este caso el uso de este tipo de marketing demandará una forma de manejar las relaciones para que se generen intercambios adicionales con base en:
- Identificación del cliente.
- Diferenciación del consumidor.
- Interacción con el usuario.
Esas tres formas de llegar a la audiencia propondrá una segmentación para el público meta de entre todo el racimo de clientes potenciales, lo que otorgará una orientación estratégica en la construcción de relaciones a largo plazo con los clientes y consumidores, aunque sea de forma digital.