Esta semana ha sido registro en diferentes estados de la repĂşblica Mexicana para candidatos a puestos de elecciĂłn popular para este año 2019, no cabe duda que la manera de hacer polĂtica ya cambio.
En diferentes partidos polĂticos hacen videos en vivo, streamings o enlaces de cuando los candidatos se van a registrar, asĂ como los candidatos o gente de su comitĂ© hacen lo mismo desde diferentes cuentas, es de llamar la atenciĂłn que este año ya no funciona la prensa comĂşn y corriente , es decir la televisiĂłn, radio , periĂłdicos etc. Lo que les funciono ahora a las precandidatos es que los vean a travĂ©s de cuentas de FACEBOOK, YOUTUBE, INSTAGRAM, TWITTER.
Las campañas no comienzan en el registro, ahora comienzan desde mucho tiempo antes solo basta ver las redes sociales de los precandidatos donde sin decirlo abiertamente se toman fotos con los colonos, realizan loterĂas, van a colonias con necesidades en fin una serie de eventos que con frecuencia pasarĂan desapercibidos, pero este año no, por eso la gran importancia de las redes sociales para sus campañas.
La publicidad electoral tradicional es cosa del pasado. Cada vez más, los canales digitales influyen de manera determinante en los movimientos sociales, el activismo y la participaciĂłn electoral. El marketing polĂtico digital se extiende más allá de la promociĂłn de candidatos, partidos y plataformas electorales en Internet incluyendo telĂ©fonos mĂłviles, redes sociales, publicidad gráfica, marketing en motores de bĂşsqueda, plataformas, comunidades y cualquier otra forma de medios digitales.
Lugares donde la población de electores es más joven es de suma importancia llegar a ese target de una manera correcta, es decir mediante redes sociales sin llegar invasivos o molestos, llegar con campañas dirigidas para cada segmento de mercado con su estrategia personalizada para segmento, no es igual un ama de casa que un millenial, sin embargo ambos usan las redes sociales ya como un estilo de vida.
Implica entender que los medios digitales no son una extensiĂłn de la mercadotecnia ni un nuevo canal de comunicaciĂłn. La estrategia electoral requiere entender toda la diversidad y complejidad de esta herramienta, abarcando tanto su desarrollo tecnolĂłgico, como los efectos que tienen en la evoluciĂłn psicolĂłgica, social, polĂtica, conductual e ideolĂłgica de los ciudadanos.
Sin embargo, la mega data y la explosión de información disponible en redes nos permiten una mejor aproximación a las preferencias, intereses, tendencias y expectativas de los votantes; lo que hace posible explorar a los segmentos objetivos y sumergirnos en sus deseos emocionales, metas, aspiraciones y miedos además de poder agrupar y analizar sus reacciones. La segmentación incluye las diversas comunidades, influencers, blogeros, youtubers, sitios y canales de los que se extrae información decisiva a la hora de votar.
Podemos mostrarle al elector el diseño de una obra pública en un recorrido virtual y proponerle una ciudad inteligente en la que pueda fiscalizar y supervisar los servicios, la obra pública, el ejercicio presupuestal y los compromisos de los candidatos. Hoy podemos seducir al elector con publicidad ecológica, no contaminante del espacio público y sobre todo segmentado de manera efectiva.
De la misma manera, podemos usar los medios digitales como canales alternos de contacto y difusiĂłn incluyendo pagados, propios y ganados para llegar y captar audiencias que incluyen publicidad, correo electrĂłnico y mensajerĂa, motores de bĂşsqueda y las mismas redes sociales.
Este un año que marcara muchas maneras nuevas de hacer polĂtica, veremos muy posiblemente el nacimiento de nuevos estrategias digitales, la importancia de las redes sociales en los electores, y muy posiblemente la creaciĂłn de nuevos mercados a travĂ©s de videos virales subidos por los mismos usuarios y no por los candidatos.