Como lo están leyendo, el marketing no hace las ventas. Cada semana, escucho historias de marcas en diferentes etapas que me cuentan sus sueños sobre penetrar en un nuevo mercado, lanzar un producto, posicionarse, realizar una campaña, ser líderes en su industria. Conversaciones amenas que generan estrategias y creatividad.
Me llama la atención que estas charlas siempre concluyan con un “¿Cuánto más voy a vender con esto?” Se me dibuja una sonrisa. Me he planteado con seriedad escribir sobre este tema, porque nuestra industria requiere con urgencia educar a sus clientes.
El marketing no es ventas
El marketing es una estrategia con acciones conjuntas para beneficiar a una marca, pero su resultado no es un cierre de venta. Partiendo de este principio, sus indicadores están relacionados a posicionamiento, exposición, número de contactos recabados o visitas a nuestros puntos de venta.
Vender es una estrategia en sí misma que requiere acciones concretas como prospectar con un perfil de cliente, calificar prospectos, realizar demostraciones, activaciones, visitas, presentaciones, alianzas, entre muchas otras acciones.
Las ventas no siempre son negocios
Vender mucho es bueno, pero no tiene ciencia si se vende barato. El meollo está en vender a un precio superior al del mercado. Ser líder de una industria es el resultado de años de construir una marca con constancia y consistencia. Crear promociones con descuentos para incrementar las ventas puede llevarte a llegar a tus mentas pero arriesgando tu margen de utilidad. Por otro lado, ser una marca barata es una percepción costosa de cambiar.
Los negocios se hacen con amigos y fans
Para hacer un buen negocio se necesita confianza, ese ingrediente que se construye todos los días con trabajo consistente para comunicar tu presencia en el mercado, los valores que representas, las causas que apoyas. Así es como las marcas hacen sus vínculos de confianza y crean seguidores que después se convierten en clientes.
Hacer amigos es hacer marketing
Una marca que invierte sus esfuerzos en posicionarse con comunicación clara, que habla de emociones y experiencias, es una marca que en el largo plazo se verá beneficiada al contar con una comunidad de seguidores. Los mecanismos idóneos para convertir a tus fans en clientes es crear formas de estar siempre disponible, invertir en la experiencia que tengan con tu producto, hacer alianzas con marcas afines, generar contenido o información valiosa, entablar conversaciones humanas con tu comunidad; por último tener en cuenta que hoy las marcas son experiencias y emociones.
En resumen, el marketing requiere creatividad y toma tiempo. Construyamos estrategias integrales que tengan un plan que fortalezca a la marca en el largo plazo. Los resultados para hoy hoy hoy son llamaradas de petate. Saludos a todos.