Internacional.- Bajo un concepto religioso y de buena voluntad, un restaurante en Carolina del Norte, ha decidido no cobrar a los clientes por lo que consumen, de hecho, retiró los precios de los menús y pide a los comensales que paguen lo que consideran que dios quisiera que lo hicieran.
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Medios locales reportaron que esta extraña estrategia llamó la atención de los consumidores, quienes bajo ese precepto de dejarles a su consideración el determinar cuánto valor tiene lo que consumieron, además de apelar a las creencias espirituales de las personas, al hacer referencia a una decisión divina para pagar.
A pesar de que pudiera parecer una idea desventajosa, la realidad es que la cultura en este lugar no da pie para que los clientes se aprovechen, ya que cuando han acudido con poco dinero, reponen lo que consumieron en su siguiente visita, esto permitió que durante la primera semana de implementar esta medida, los ingresos del restaurante se triplicaron.
La estrategia del marketing de la buena voluntad, también conocido como pague lo que quiera, ha comenzado a extenderse por el mundo y ya se pueden encontrar otros negocios que lo aplican como en Merlbourne, Australia, Denver, Colorado, o en Nueva Jersey.