No es un secreto que el futbol se a uno de los negocios más rentables en el mundo del deporte, de ahí que grandes empresarios sean dueños de algunos de los principales equipos, Román Abramóvich del Chelsea, o Avram Glazer, su familia es dueña del Manchester United (él es el presidente del club), son sólo algunos ejemplos famosos.
Ahora, se habla del interés de Mark Zuckerberg por entrar a esta élite de empresarios dueños equipos de futbol en las principales ligas del mundo. Al parecer esto fue real, aunque al co-fundador de Facebook le dieron una respuesta poco esperada.
Según información de medios como The Daily Express, Sunday Times y La Gazzetta dello Sport, hubo un interés ‘confirmado’ por parte de Zuckerberg quien, a través de Iconic Capital, un fondo de inversión que agrupa a varios CEOs de compañías de Silicon Valley, presentó una oferta millonaria formal por comprar al Tottenham Hotspur Football Club, uno de los clubes con mayor tradición en la Premier League.
De acuerdo con los reportes, la oferta asciende a alrededor de mil millones de libras esterlinas (aproximadamente mil 257 millones de dólares) a cambio de todas las acciones del club londinense. La propuesta sería de casi 5 veces mayor al valor de mercado estimado por el Tottenham que es de 265.63 millones de dólares, de acuerdo con datos de Transfermarkt.
Desde hace meses algunos medios británicos e internacionales especulan sobre rumores respecto a una posible venta de los ‘Spurs’. Pero, pese a lo jugosa de la oferta, Joe Lewis y Daniel Levy actuales propietarios (grupo Tavistock y Enic Group) rechazaron tajantemente la venta.
A través de las redes sociales -curiosamente usado Twitter y no Facebook- emitieron un mensaje en el que hacen énfasis en su intención de no cambiar de propietarios al Tottenham. “El Consejo no está en ninguna discusión relativa a una oferta de adquisición para el club”, señalan desde Londres.
Club statement – https://t.co/Xbhoa9QfBs pic.twitter.com/eLhLUhF4VC
— Tottenham Hotspur (@SpursOfficial) 9 de julio de 2017
El rechazo del equipo londinense puede estar motivado a que pasa por un momento importante de reestructuración en la que planean llevar su marca al plano internacional.
Entre sus planes destaca una inversión millonaria para la construcción de un nuevo estadio que tendrá un costo final de 750 millones de libras, y que sustituirá al viejo White Hart Lane, que ya tiene más de 100 años de antigüedad. A ello se suma una alianza con la NFL que se traducirá en llevar dos partidos de futbol americano por año a su nueva casa que contará, entre otras modernidad, con un campo de juego retráctil.
