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Buscan fortalecer la primera criptomoneda LGBTQ+ en torno a la marcha del Orgullo.
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Fundadores esperan recaudar suficiente dinero para iniciativas de derecho y difusión.
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La moneda digital trabaja en un metaverso con beneficios para integrantes del colectivo.
La nueva criptomoneda LGBTQ+ fue anunciada desde diciembre de 2021 y logró ver la luz en el ecosistema blockchain a pocas semanas de llevarse a cabo la Marcha del Orgullo a nivel mundial.
MariCoin es uno de los 10 proyectos seleccionados por el programa de aceleración de Algorand Miami Accelerator, una de las plataformas blockchain que ha tomado relevancia en el último año y que obliga a los emprendedores del colectivo a constituir la nueva firma en Miami, pero que también les abre la oportunidad de acceder a la financiación de Borderless Capital, fondo de capital riesgo de la organización.
Y es que, aunque fungirá como cualquier otro proyecto cripto, la utilidad de este token busca fortalecer a la comunidad LGBTQ+ e integrar a todos sus miembros en una “potencia mundial” que defienda los derechos de las personas con sexualidad diferente y promueva la no discriminación por identidad de género.
MariCoin está constituida, principalmente, por Juan Belmonte, como presidente, y Francisco Álvarez, como el CEO.
Esta iniciativa ya ha recibido hasta ahora inversión de Borderless Capital, early adopter y otros inversores, generando interés de varios empresarios y organizaciones civiles y privadas que se acercan cada vez más a proyectos con causa, entre ellos destaca la agencia online DDB a la que Álvarez se refirió como “la tercera agencia mundial de marketing” y quien hoy trabaja en un branding para la marca de criptomoneda.
La criptomoneda LGBTQ+
Hasta ahora ya hay más de 2 mil maricoiners en la fase actual de preventa en dinero fiat (euros, dólares, etc), el cual espera terminar en 1,2 millones de dólares para el próximo 23 de junio, Día Mundial del Orgullo LGTBIQ+.
Los creadores de MariCoin están creando un metaverso, o mejor dicho “Mariverso”, para la comunidad LGBTQ+, donde llevarán a cabo una labor personalizada para la adquisición y transacción del token, incluso con apoyo de la asociación de Onyze, una solución de custodia de criptomonedas.
De acuerdo con Iván Becerro, CIO de la compañía e criptomoneda, el “Mariverso” también contara con una isla donde los usuarios del token tendrán medios preferenciales para comprar tierras, disfrutar de los negocios virtuales, convertirse en el avatar que deseen, construir casas, empresas, asistir a conciertos…y todo lo que el ecosistema digital les permita con la economía MariCoin.
“Esta es una moneda que viene para empoderar al colectivo. Me daría hoy por satisfecha si todos entendiesen que el trasfondo es social, no especulativo”, dijo Malasya Serrano, chief community Officer en MariCoin.
Asimismo, en los próximos meses la empresa inclusiva buscara cobrar una pequeña comisión del 0.5 por ciento en las transacciones, esto para su mantenimiento y desarrollo, aunque se declaren una fundación sin ánimo de lucro.
Además, este mismo año MariCoin estará presente en los “Orgullos” de 20 países con el fin de posicionarse en todo el mundo y llevar su causa financiera-social a todas las comunidades, pero sobre todo a aquellas zonas donde hay más complicaciones para celebrar la fiesta, ya sea por financiación o por seguridad.
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