Las candidaturas y su desempeño dentro del mercado político se encuentra en una constante innovación, que ha marcado la pauta para el desarrollo de tendencias y nuevas formas de relacionarse con los votantes, al poder perfilar de mejor forma su intención de voto de la ayuda de la tecnología, que ha permitido a la oferta política estar presente en el proceso de decisión de los votantes, ya sea por la información que buscan o estar presentes en el momento adecuado en que los ciudadanos son parte de un momento social que genera conversación en redes sociales.
Esto ha llevado a los candidatos a definir la apuesta de sus campañas políticas, para estar presente en el momento adecuado de las audiencias de redes sociales, lograr identificación con votantes, llegar a ciudadanos que los desconocen de la mano de estrategias innovadoras o apostar por cambios radicales que eliminan el factor predecible de sus candidaturas.
Para estar presente en el momento adecuado, resulta relevante para las marcas políticas construir perfiles a través de mensajes, identificación de votantes y ser acertado en el redoble de los esfuerzos que se llevan a cabo para lograr la relevancia de una campaña.
Dicho esto, los candidatos ya no solo apuestas por campañas que en México son conocidas de suelo, sudor y saliva, este esfuerzo se ha trasladado al mundo digital, donde se cuentan en millones los usuarios de estas plataformas, de quienes se tiene un mapa ampliamente definido, sobre su actividad digital, consumo de información por temas y acciones que determinan su participación, motivando a los mercadólogos de las campañas políticas a diseñar mensajes adecuados.
Este panorama nos ayuda a entender por qué Margarita Zavala renunciaría al PAN y podría buscar la Presidencia de 2018 como candidata independiente: se trata de una acción que aprovecha los esquemas políticos del país, la oportunidad que encuentran a través de medios digitales y el desempeño de las marcas personales.
Imagen: Flickr/Jalisco Campus Party