Por Alan Campos
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Hace un par de días trascendió que el Manchester United renovó su contrato con la marca deportiva Nike como sponsor técnico por una década y mil millones de dólares, convirtiéndose en el acuerdo más lucrativo de este tipo, sin embargo ¿verdaderamente vale la pena?
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Empecemos por decir que la cifra puntual que el United ganará será de 700 millones de euros, aproximadamente 965 millones de dólares, es decir un ingreso anual 96.5 millones de dólares sin necesidad de saltar a la cancha.
Pero las percepciones económicas del Manchester United por su jersey no se limitan a los casi 100 millones de dólares que Nike pagará por vestir al conjunto inglés durante las próximas 10 temporadas, pues los Red Devils no sólo ostentan al sponsor técnico más caro de la historia, sino también al sponsor de playera más caro, Chevrolet, quien pagará cerca de 80 millones de dólares al año durante 7 años.
Únicamente por estos dos contratos el club británico se embolsará durante los próximos 10 años una cifra aproximada de mil 560 millones de dólares, cifra que representa el 49.3 por ciento del valor total de la franquicia (3 mil 165 millones de dólares) de acuerdo con lo reportado en el ranking de la revista Forbes que les ubica como la segunda franquicia deportiva más valiosa del mundo.
Ahora, normalmente uno diría que el invertir en patrocinios con el Manchester United es un negocio redondo (Aon por ejemplo aumenta el tráfico a su sitio web en un 55 por ciento los días que juegan los Red Devils), sin embargo actualmente el equipo atraviesa un periodo de transición que hace complicado avalar la decisión tomada tanto por Nike como por Chevrolet.
Sólo por decir algo, actualmente el Manchester United se encuentra a 11 puntos de distancia de la zona de Champions League cuando le restan únicamente 8 encuentros por disputar lo que hace complicado imaginar al equipo dentro de la Liga de Campeones del próximo año, de concretarse dicha calamidad, tanto Nike como Chevrolet perderían visibilidad en los más de 70 países que tiene presencia el torneo y que le llevaron a convertir la Final del mismo en el evento deportivo más visto del mundo por encima del Super Bowl con más de 109 millones de espectadores.
Si bien es cierto que todo puede pasar e incluso el Manchester United puede terminar coronándose como campeón del certamen, lo más probable es que los Red Devils tarden en par de años en regresar al lugar que están acostumbrados lo que se traducirá en pérdidas para ambas marcas.
Sin embargo tampoco podemos desestimar así de fácil a uno de los clubes más importantes del mundo, con una base de 659 millones de aficionados en todo el mundo (de acuerdo con números proporcionados por el propio club) y sólo el tiempo será quien se encargue de demostrarnos si el dinero invertido por Nike y Chevrolet fue dinero tirado a la basura u otra victoria por parte del club británico.
