No recuerdo muchos presidentes modernos que hayan ejecutado conferencias de manera constante durante un perĆodo tan largo de tiempo, mucho menos en medio de una pandemia. Siempre he sostenido que este ejercicio es uno de los pilares de la comunicaciĆ³n, mercadotecnia e imagen del presidente. No obstante, a 3 aƱos desde su inicio ha caĆdo en un proceso barroco, lo que etimolĆ³gicamente seƱala a aquello que estĆ” excesivamente recargado u ornamentado.
1. Longitud de mensajes en la MaƱanera de AMLO
Hay mucho aprendizaje de marketing acerca de la conferencia matutina, el primero y mĆ”s evidente es el desgaste del propĆ³sito: la primera ediciĆ³n durĆ³ 52 minutos con 12 segundos y sumĆ³ 591 mil vistas en el canal de AMLO, como puede comprobarse en el canal de la Presidencia o en el de Lopez Obrador (https://www.youtube.com/c/lopezobrador/videos) en contraste, el lunes 25 de abril alcanzĆ³ 2 horas con 46 minutos. Es claro que las conferencias se han hecho cada vez mĆ”s largas y con ello ha disminuido la atenciĆ³n; por ejemplo, de las 12 conferencias mĆ”s vistas en el Canal del Gobierno de MĆ©xico (https://www.youtube.com/c/gobiernodemexico/videos) se puede extraer que el promedio ideal de conferencias no deberĆa exceder 49 minutos con 46 segundos. En el canal del presidente los 12 videos mĆ”s vistos tienen en promedio 1 hora con 26 minutos. El primer aprendizaje es que la duraciĆ³n del mensaje erosiona la atenciĆ³n, en especial si se compara con el contenido que absorbe el pĆŗblico mĆ”s joven en Tik Tok, donde el video mĆ”s visto en esa plataforma en el 2021 durĆ³ menos de 10 segundos.
2. Crecimiento de audiencia
Conforme el espacio se mantuvo no se dio un crecimiento de audiencia. La primera conferencia alcanzĆ³ 591 mil vistas, la del 27 de abril 736 mil. NingĆŗn medio se sentirĆa satisfecho con un crecimiento del 20 por ciento de audiencia en 4 aƱos. No obstante tambiĆ©n es cierto que cuando se trata de temas coyunturales, como el Litio, la conferencia puede llegar a mĆ”s de un millĆ³n de vistas. Ćsto indica claramente que la maƱanera es sumamente sensible a la coyuntura y que estĆ” lejos de marcar agenda como sucedĆa en un principio. En marketing debemos tener cuidado de no comunicar excesivamente. Es increĆble que un paĆs del tamaƱo de MĆ©xico se quede sin temas relevantes para una conferencia presidencial, pero la realidad es que asĆ sucede. Los grandes temas seguramente suceden una o dos veces al mes, lo demĆ”s es comunicaciĆ³n tĆ”ctica. En ese sentido la maƱanera ācomo vehĆculo de comunicaciĆ³nā serĆa mĆ”s efectiva si fuera llevada por un jefe de prensa y que las noticias importantes las diera el Presidente. AsĆ serĆa mĆ”s fĆ”cil enmarcar la importancia.
3. Vocero
Desde un inicio, como jefe de gobierno en la CDMX, AndrĆ©s Manuel LĆ³pez Obrador creĆ³ la maƱanera como un vehĆculo personal, es parte intrĆnseca de su imagen. Al llegar a la presidencia trajo todos los valores positivos del medio (la maƱanera es al fin un medio) pero tambiĆ©n las debilidades. Cuatro aƱos de mantenimiento de un vocero principal confunde al receptor del mensaje, en ocasiones se trata de mensajes importantes, en otros no tanto. Eso diluye al vocero, esto sucede hasta con los locutores mĆ”s experimentados del mundo en radio y TV. Por eso es indispensable traer expertos y colaboradores, para compartir la carga y aprovechar nuevas audiencias. Pocos presidentes han tenido el manejo de escenario de Donald Trump, y en ese caso era impensable que compartiera escenario. Lo mismo sucede de alguna manera con el presidente LĆ³pez Obrador, su presencia de marca es de tal magnitud que los demĆ”s secretarios y expertos fracasan al ayudar a cargar el peso de la maƱanera. Tal vez la excepciĆ³n fue LĆ³pez-Gatell pero eso fue causado seguramente por la coyuntura.
4. De cara a las elecciones desde la MaƱanera de AMLO
Viene el cierre de gobierno y con ello las campaƱas electorales. La maƱanera tiene que transformarse si busca comunicar el mensaje del gobierno mientras los candidatos de todos los partidos buscan gobernadores y la presidencia. ArgumentarĆa que la maƱanera como vehĆculo de comunicaciĆ³n deberĆa servir al PaĆs y sus ciudadanos, no se trata del presidente en turno. En ocasiones anteriores he expresado que la maƱanera podrĆa trascender este gobierno y convertirse en un ejercicio de comunicaciĆ³n mexicano. Pero para que esto suceda debe considerarse como un medio, una herramienta para mantener al paĆs informado. Es posible que sea uno de los legados de esta presidencia, pero tendrĆa que aprender de los errores y convertirse en un mejor formato, mĆ”s Ć”gil e incluyente. Los jĆ³venes no ven contenido de 2 horas y eso hace que la maƱanera de AMLO no sea democrĆ”tica en tĆ©rminos de marketing, mas bien termina informando a medios, periodistas y polĆticos lo que abate la idea central de su creaciĆ³n. NingĆŗn mexicano trabajador puede escuchar al presidente 2 horas al dĆa. Se trata de 8 a 10 horas semanales, mas, por ejemplo, un usuario promedio de Netflix en el Reino Unido ve la plataforma por 8 horas y 52 minutos. Es claro que si hay un deseo de acercar al gobierno con la ciudadanĆa a travĆ©s de este formato, hay que modernizar, enfocar y recortar esos mensajes, de lo contrario podrĆa caer en el Canal de Congreso o la SesiĆ³n del Pleno de la SCJN que en el mejor de los casos suman 5 mil vistas por dĆa.