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Ponen en el centro de la difusión y la publicidad una problemática creciente de redes sociales.
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Impulsan la autoestima de las adolescentes con deepfake en un feed de video sobre belleza.
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Madres e hijas son impactadas con duro mensaje sobre los “consejos tóxicos” que se viralizan.
Recortarse las pestañas para adherir postizas; limarse los dientes para darles forma; reducir la ingesta de alimentos para obtener un vientre más plano; o someterse a algunos procedimientos quirúrgicos ambulatorios para mejorar la imagen del rostro son algunos de los “consejos tóxicos” de belleza que diariamente reciben los adolescentes en redes sociales.
Por ello, para evidenciar los problemas de imagen y autoestima que generan este tipo de contenidos, son las mamás de un grupo de jóvenes las que decidieron convertirse en influencers y exteriorizar la forma en que los estándares de idealización se esparcen a lo largo del mundo. Todo es parte de una gran campaña publicitaria.
“Desintoxica tu Feed”
Con el Social Media en el centro de la atención de los nuevos consumidores, la responsabilidad de las marcas se ha focalizado también en ayudar a las nuevas generaciones a romper estereotipos y cuidar su integridad de aquellas prácticas o “recomendaciones” que pudieran dañar a su salud.
Y es que, como ejemplo, el 80 por ciento de las niñas encuestadas por Dove expuso que necesitan hablar más con sus padres sobre cómo interpretar las publicaciones de belleza idealizadas, algo que dio a la marca una herramienta de necesidad para crear una campaña de divulgación que ayude a la población a afrontar el desafío de la viralización.
Bajo el concepto “The confidence kit” (“El kit de confianza”), el workbook de la marca aborda claves de redes sociales por medio de un taller virtual en el que, el próximo 12 de mayo, especialistas y psicoterapeutas puedan esclarecer dudas a los progenitores sobre el asunto. Mientras tanto, con creatividad y una imagen dura de la realidad, Dove ha publicado la pieza: “Detox Your Feed: The Parents Guide” (“Desintoxica tu Feed: la guía para padres”).
“Esta campaña es importante a medida que crece el discurso público sobre los efectos nocivos que las redes sociales pueden tener en las niñas. Si bien puede parecer inofensivo, dado que la mitad de las niñas dicen que las redes sociales causan baja autoestima, la exposición continua tiene el potencial de tener un impacto negativo y duradero“, explicó la trabajadora social y psicoterapeuta Nadia Addesi, que colabora con Dove para contextualizar la naturaleza de los consejos de belleza dañinos que se han normalizado y viralizado en los feeds de los adolescentes.
La experta impulsó esta campaña creativa y de impacto social con el fin de marcar la pauta del largo recorrido que se espera lograr en el entendimiento y erradicación de estas tendencias y donde #DetoxYourFeed pueda influir en el desarrollo de la confianza corporal y la autoestima de aproximadamente250 millones de niñas para 2030.
Mediante un claro deepfake, la última campaña de Dove, que forma parte de la plataforma de concienciación The Dove Self-Esteem Project, incluye herramientas para abordar el conflicto de las tendencias peligrosas en redes sociales.
Esta pieza creativa fue desarrollada por Ogilvy para la marca Unilever y ha generado conversación en torno a las definiciones más amplias de belleza entre las mujeres jóvenes y cómo estas se han distorsionado culturalmente a lo largo de los años.
“Hemos identificado un problema claro que está erosionando la autoestima de nuestras niñas y necesita atención y acción inmediatas. Creamos esta campaña no solo para crear conciencia sobre la naturaleza insidiosa de los consejos de belleza tóxicos, sino también para ayudar a los padres a navegar conversaciones difíciles y empoderar a las adolescentes para que dejen de seguir el contenido que les hace sentir mal consigo mismas“, comentó Leandro Barreto, Vicepresidente Global de Dove, en un comunicado.
“Detox Your Feed” (“Desintoxica tu Feed”) busca que sean las adolescentes quienes definan sus propios estándares de belleza y elijan el tipo de influencias que quieren seguir en las redes sociales; esto, usando una pieza clave: a sus mamás.
Mediante una serie de piezas audiovisuales, el contenido muestra a las hijas observando un feed de video en el que son sus propias madres quienes aparecen a cuadro como todas unas influencers hablando sobre algunas de las acciones más “tóxicas” a las que pueden someterse para “verse bien”.
Horrorizadas, jóvenes y adultas tomas conciencia sobre las recetas a las que se exponen día a día en las plataformas digitales, como el “fitspo” -combinación de “fitness” e “inspiration”-, “thinspo” -apología de la delgadez- o la promoción de procedimientos cosméticos.
Sin embargo, el impacto retoma más relevancia aún cuando es el deepfake de Dove el que lo hace todo. Mientras madre e hija observan una pantalla, ponen en sus propias bocas estas “recomendaciones” con mensajes tóxicos comunes.
“Como madre y alguien que ha sentido la presión de las redes sociales para verse perfecto, es importante para mí que las personas se den cuenta de lo que hay en los feeds de sus hijos adolescentes y los ayuden a navegar con confianza las conversaciones al respecto“, señaló la actriz y modelo Gabrielle Union, quien participó con su hija Zaya Wade en la campaña de Dove.
De acuerdo con la firma Unilever, las iniciativas creativas, publicitarias y sociales de The Dove Self-Esteem Project han llegado a más de 82 millones de jóvenes en 150 países hasta la fecha.
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