Tener una marca de renombre es un trabajo complicado el cual puede tener valor, pero a su vez una gran responsabilidad, algo que Fisher-Price debe tomar en consideración sobre el lanzamiento de nuevos productos para garantizar una buena experiencia alrededor de ellos, pues recientemente se dio a conocer que la marca propiedad de Mattel debía retirar algunos productos infantiles que habrían causado la muerte de cuatro bebés.
Y es que no basta con presentarlos en un empaque atractivo, las marcas también deben buscar la forma de orientar a los consumidor usarlos de forma conveniente para evitar cualquier tragedia alrededor de ellos que afecte la imagen de una de las marcas más fuertes en el sector infantil, y haga que los padres y madres de familia pierdan la confianza, como lo hizo Erika Richter.
El antecedente
Hace algunos días se informó que la línea de Mattel retiraría del mercado una silla mecedora para bebés, luego de que cuatro bebés perdieran la vida gracias a que el producto se había colocado boca arriba, lo que provocó la asfixia de los bebés que fueron encontrados boca abajo.
Fisher-Price aseguró que retiraría del mercado sus mecedoras 4-in-1 Rock ‘n Glide, mismas cuya principal característica y atributo es imitar el movimiento de los brazos para arrullar a un bebé, así como la silla mecedora 2-in-1 Soothe ’n Play Glider, producto similar al mencionado anteriormente a pesar de que alrededor de esta propuesta no existen acontecimientos que lamentar.
Cabe señalar que tan solo entre enero de 2014 hasta diciembre de 2020, se vendieron cerca de 120 mil sillas 4-in-1 Rock ‘n Glide y 55 mil 2-in-1 Soothe’ n Play en Estados Unidos, por lo que la empresa también aseveró que educará los padres y cuidadores sobre el uso seguro de sus productos, “incluida la importancia de seguir todas las advertencias e instrucciones”.
Madre decepcionada de la marca
Este no es el primer caso que Fisher-Price enfrenta por acusaciones sobre sus productos. Erika Richter, madre de una bebé de dos semanas que falleció hace casi tres años utilizando un mientras usaba un Fisher-Price Rock ‘n Play Sleeper, se pronunció al respecto en Good Morning America, asegurando que ella usara su voz para que ningún otro padre tenga que vivir lo que ella.
La mujer formó parte de una audiencia del Congreso el pasado lunes, donde se dio seguimiento al informe del Comité de Supervisión y Reforma de la Cámara de Representantes el cual señaló que Fisher-Price ignoró repetidas advertencias de que su durmiente Rock ‘n Play era peligroso antes de que el dispositivo fuera retirado del mercado en abril de 2019.
“Confiábamos en una marca de renombre y nos equivocamos”, aseveró Richter mientras sostenía la ropa de su bebé.
El comité de supervisión indicó en su informe que, tras 20 meses de investigación, la empresa no había consultado a pediatras ni tomado otras medidas clave para garantizar que su producto, en este caso Rock ‘n Play, fuera seguro antes de lanzarlo al mercado y por el cual obtuvo al menos 200 millones de dólares en ingresos después de su lanzamiento en 2009.
El informe encontró que más de 50 muertes infantiles estaban relacionadas con el durmiente.
“Cuando obtuve el Fisher-Price Rock n ‘Play Sleeper, no pensé en nada más que en un producto de Fisher-Price, por lo que debe ser seguro, y si tantos padres lo usan y están entusiasmados con él , que sin duda se realizaron las pruebas adecuadas y era seguro de usar “, dijo Richter a” GMA “. “No se me pasó por la cabeza que este producto que se llamaba Fisher-Price Rock n ‘Play Sleeper no sería seguro de ninguna manera”.
La madre afirma que la culpa recae sobre la cultura corporativa de Fisher-Price, un problema regulatorio y de conciencia del consumidor.
Fisher-Price aseveró a ABC News que “no hay nada más importante” para la empresa que la seguridad de sus productos, señalando que el Rock ‘n Play Sleeper fue diseñado y desarrollado tras una extensa investigación, pues había superado todos los estándares regulatorios aplicables.
Habrá modificaciones en ley
La Comisión de Seguridad de Productos del Consumidor (CPSC) aprobó una nueva regla federal para los productos para dormir para bebés que entrará en vigencia en 2022, con la cual todos los productos deberán probarse para confirmar que cumplan con el Estándar de seguridad de la CPSC, el cual señala que el ángulo de la superficie para dormir es de 10 grados o menos en cunas y mecedoras.
Asimismo, Richter comentó que espera que se establezca una autoridad independiente que supervise las medidas de seguridad de Fisher-Price en el futuro, evitando que empresas como esta se “autorregulen” en lo que respecta a la seguridad.
Lo que sucedió en todos los casos relacionados a productos de la marca de Mattel habla de la importancia de darle prioridad a temas de seguridad para que los consumidores no pierdan la seguridad en la marca o empresa, pues de acuerdo con Incaval esta es un elemento que genera el 40 por ciento de las decisiones de compra, lo que sin duda afectará a Fisher-Price.
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