• El 51 por ciento de los jugadores en México son mujeres.

• Mamá Lucha se convirtió en una gamer de verdad al reconocer a Noobmaster69.

• La edad promedio de los jugadores está entre el 25 a 34 años de edad.

Luego de que Mamá Lucha se mostró de manera impresionante con Fortnite, usuarios en redes sociales no dejaron de cuestionar este tipo de videos, por lo que el personaje de Bodega Aurrerá se puede mostrar de manera inesperada.

Según el IFT, la edad promedio de los gamers en México es de 25 a 34 años en un 24 por ciento, mientras que el 51 por ciento de los jugadores en México son mujeres.

En el video que circula en las redes sociales, se mostró el momento en el que Mamá Lucha confirmó que este tipo de acciones se mostró de manera inesperada, ya que confirmó que conoce a más ni menos que al usuario de Nobmaster69.

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Este personaje se puede mostrar como algo inesperado, ya que es una referencia al mundo gamer gracias a Marvel, por lo que compartió en redes sociales este tipo de referencias por diferentes motivos diferentes, por lo que se mostró como interesante.

Entre los comentarios, los gamers se mostraron emocionados tras la confirmación de Mamá Lucha en el mundo gaming, por lo que están solicitando de manera urgente su intervención en juegos como Fortnite.

La llegada de Mamá Lucha en Fortnite sí puede ser posible, ya que solo hay que recordar que El Chapulín Colorado, un personaje mexicano, llegó a Fortnite y a Fall Guys.

@bodegaaurrera Respuesta a @gabriel ♬ sonido original – Bodega Aurrera

Videojuegos y marcas.

La relación entre las marcas y los videojuegos ha evolucionado hacia un terreno donde la publicidad tradicional se mezcla con experiencias inmersivas y significativas.

Las marcas han dejado de limitarse a simples apariciones visuales para integrarse de forma creativa dentro de los mundos virtuales, aprovechando la interacción y el entretenimiento como herramientas poderosas de conexión con el público joven y digitalmente activo.

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En este entorno, los videojuegos se convierten en plataformas que no solo venden productos, sino que fortalecen la imagen de marca y generan lealtad.

A través de colaboraciones, misiones especiales, objetos coleccionables o entornos personalizables, las marcas pueden insertarse de manera orgánica en la experiencia del jugador. Esto va mucho más allá de los banners publicitarios, pues implica ser parte activa de la narrativa o de la jugabilidad.

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Además, los videojuegos ofrecen datos en tiempo real sobre el comportamiento de los usuarios, lo que permite a las empresas afinar sus estrategias con gran precisión.

Esta sinergia también ha abierto la puerta a eventos virtuales patrocinados, torneos oficiales y desafíos con recompensas que vinculan la experiencia lúdica con la marca. La comunidad gamer valora este tipo de propuestas cuando se integran de manera genuina y no invasiva, lo que obliga a las marcas a pensar de forma creativa y respetuosa del entorno.

Porsche

Un caso representativo es el de Porsche, que ha trabajado en integrar sus modelos en simuladores de conducción como Gran Turismo, permitiendo a los jugadores experimentar sus vehículos de forma virtual y acercándose a un público clave sin interrumpir la experiencia del juego.

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