• A través de su iniciativa, Lyft espera reducir el costo tanto de los automóviles eléctricos como de su infraestructura

• Esta compañía y su rival Uber han sido criticadas en otras ocasiones por ser dañinas al medio ambiente 

• De hecho, varios estudios aseguran que la actividad de estas organizaciones sería peor que los viajes individuales en auto

Hay pocos casos en donde un mercado es prácticamente dominado por un par de empresas de gran poder. Sin embargo, en las contadas situaciones que existen de este tipo, la prioridad de cada una de las partes es eliminar a la otra. Por lo general es una misión casi imposible, ya que suelen tener capacidad y dominio del mercado muy similar. A la vez, es posible lograrlo si una logra hacer, y cumplir una gran promesa al público. Esto pasa en las marcas Uber y Lyft.

Desde mayo, ya que las dos habían tenido un desastroso debut en la bolsa, son las únicas marcas importantes en el entorno de taxis compartidos en Estados Unidos (EEUU). Todo este tiempo Uber y Lyft han tratado de destruirse mutuamente para por fin quedarse para sí solas el atractivo mercado americano. Y de acuerdo con The Verge, ésta última podría tener la ventaja gracias a una promesa que justo acaba de hacer: 100 por ciento autos eléctricos para 2030.

Para la próxima década, Lyft anunció que quiere que todos los vehículos en su flotilla sean o cero emisiones o completamente eléctricos. La rival de Uber no se dispuso a revelar cuánto está dispuesta a dedicar para conseguir este objetivo. Sin embargo su co-fundador, John Zimmer, aseguró que es su responsabilidad para crear “comunidades más limpias, saludables y equitativas”. El proyecto es parte de su constante compromiso en pro de la sustentabilidad.

¿La apuesta de Lyft podría acabar con Uber?

Esta iniciativa también refleja un creciente interés en los automóviles eléctricos. Por ejemplo, la alemana Volkswagen ha puesto mucho énfasis en la producción de camionetas y autos de ese tipo. Ford, al igual que Lyft, se decidió a plantarle la cara a Uber, en otra línea de transporte. En Subaru se tienen también objetivos ambiciosos para la década de 2030. Incluso que no suelen competir en este mercado, como Dyson, están listos para sumarse a la carrera ahora mismo.

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Hay que volver a la propuesta de Lyft. Su promesa para acabar con Uber no es menor. Se va a requerir un extensivo programa de incentivos y conseguir un sinfín de aliados dentro del sector automotriz para llegar a esta meta. Al mismo tiempo, la sustentabilidad y el medio ambiente se han convertido en conceptos muy importantes para los consumidores. Si en el transcurso de los próximos años demuestra resultados contundentes, podrá robarle una parte del mercado.

Por otro lado, hay que recordar que Uber tiene una estructura internacional que Lyft no puede equiparar. Cierto, la compañía de Dara Khosrowshahi todavía se mantiene principalmente de las contribuciones de sus inversionistas. Pero mientras tenga este apoyo, es poco probable que se retire del productivo mercado de EEUU. Así pues, aunque la promesa de un sistema más sustentable es excelente como valor agregado, no hará mucha diferencia a largo plazo.

Búsqueda de un mundo más sustentable

Más allá de la batalla entre Lyft y Uber, el interés en el medio ambiente ha crecido de forma constante a lo largo de casi todas las industrias. Por ejemplo, tras la presión de Greenpeace, Google se comprometió a ya no vender sus soluciones de Inteligencia Artificial a marcas de extracción petrolera. El nuevo director creativo de Givenchy prometió que, como parte de su cambio de rumbo, se enfocará más en esta meta. Incluso Starbucks trabaja en este objetivo.

Por supuesto, las iniciativas de Lyft responden a las nuevas exigencias de los consumidores. En datos de Nielsen, temas como contaminación del agua y el aire preocupan al 60 por ciento de la población a lo largo de todas las regiones. Forbes también señala que nueve de cada 10 consumidores tienen una imagen más positiva de las marcas que apoyan temas sociales y de sustentabilidad. Y Sustainability asegura que incluso puede reducir los costos de los negocios.