El expresidente brasileƱo Luiz InĆ”cio Lula da Silva quedó bajo custodia de la policĆa federal brasileƱa este sĆ”bado, despuĆ©s de varias horas en que miles de seguidores congregados en la sede del Sindicato de los MetalĆŗrgicos de Sao Bernardo do Campo le impidieron salir a entregarse.
Seguidores de Lula da Silva lo llevan en andas antes de que se entregue a la PolicĆahttps://t.co/LCIU9SdDra pic.twitter.com/sWbGvfLFaW
ā RT en EspaƱol (@ActualidadRT) 7 de abril de 2018
ImÔgenes transmitidas en vivo por la televisión brasileña mostraron cómo Lula da Silva tuvo que salir a pie, rodeado por cientos de personas, mientras las fuerzas del orden lograron entre empujones colocarlo en un auto.
OJO Ahora…Lula Da Silva se entrega a la policĆa federal de Brasil y es trasladado a una cĆ”rcel. Video: @AmericaTV pic.twitter.com/H2KwaYQ1ok
ā RCTV.net (@RCTVenlinea) 7 de abril de 2018
Una caravana de vehĆculos se dirigió a un aeropuerto de Sao Paulo, desde donde el exmandatario fue llevado en avión a la ciudad Curitiba, unos 450 kilómetros al sur, para ingresar en la sede de la policĆa federal de la ciudad e iniciar asĆ a cumplir la pena de 12 aƱos y un mes de cĆ”rcel.
En la maƱana, durante su Ćŗltimo discurso, Lula da Silva anunció que se entregarĆa a las autoridades, a pesar de que considera su enjuiciamiento como una farsa jurĆdico-mediĆ”tica, destinada a impedir que compita por un tercer mandato presidencial en las elecciones de octubre.
āCuanto mĆ”s me atacan, mĆ”s crece mi relación con el puebloā, dijo en referencia a medios de comunicación brasileƱos como el grupo Globo, que el exmandatario considera partĆcipe junto a la FiscalĆa de una trama para dejarlo fuera de las elecciones presidenciales de octubre próximo.
āLos poderosos pueden matar una, dos o tres rosas, pero jamĆ”s conseguirĆ”n detener la llegada de la primaveraā, agregó Lula da Silva, quien ofreció un discurso de cerca de una hora antes de ser llevado en hombros por sus simpatizantes.
Fue la primera vez que el expresidente se pronunció en pĆŗblico, tras la orden del juez Sergio Moro de entregarse a la policĆa ayer viernes antes de las 17:00 horas (tiempo local) para cumplir la condena de 12 aƱos y un mes de cĆ”rcel por corrupción y lavado de dinero dictada en su contra en el marco de la Operación Lava Jato.
El evento de este sĆ”bado inició con una celebración religiosa en honor a la esposa fallecida de Lula da Silva, Marisa Leticia, celebrada a las puertas del Sindicato de los MetalĆŗrgicos en la ciudad de Sao Bernardo do Campo, organización en la que Lula da Silva creció como sindicalista y polĆtico.
Lula da Silva dijo que se entregarĆa a la policĆa para ser encarcelado, donde este hombre de 72 aƱos y dos veces presidente del paĆs comenzarĆ” a cumplir la pena impuesta por la justicia.
āVoy a cumplir la ordenā del juez, dijo el exmandatario vestido con un pantalón negro y una playera azul marino, en un discurso realizado junto a la expresidenta Dilma Rousseff, miembros del Partido de los Trabajadores (PT), del que es fundador, y aliados de otras formaciones polĆticas de izquierda brasileƱa.
Al grito de āĀ”no se entregue!ā, cientos de personas al pie del escenario montado frente a las oficinas del sindicato, mostraron su apoyo al exmandatario, que instó a las organizaciones sociales a movilizarse mientras Ć©l permanezca en prisión.
āUstedes tendrĆ”n que transformarse en Lula y caminar por el paĆs haciendo lo que se tienen que hacer. Ā”Tienen que saber que la muerte de un combatiente no para la revolución!ā, lanzó.
Aseveró que vive un momento de āmayor indignación que un ser humano viveā, y negó ser contra la Operación Lava Jato, que provocó un terremoto polĆtico en buena parte de AmĆ©rica Latina por las coimas (sobornos).
Durante la celebración religiosa en honor a su fallecida esposa, el juez de la Corte Suprema, Edson Fachin, rechazó el Ćŗltimo de los recursos presentados por la defensa del exmandatario para intentar evitar su ingreso en prisión, en la enĆ©sima derrota jurĆdica del exsindicalista.
AsĆ, el expresidente deberĆ” iniciar a cumplir la pena de cĆ”rcel en una celda especial en sede policial en Curitiba, bastión de la Operación Lava Jato, separado de otros presos.
Presidente de Brasil por dos mandatos (2003-2010), Lula da Silva fue condenado en segunda instancia a 12 aƱos y un mes por beneficiarse de un departamento de tres plantas en la localidad costera de GuarujĆ”, en el litoral de Sao Paulo, a cambio de favores polĆticos a la constructora OAS.
Tiene mĆ”s de media docena de causas aĆŗn abiertas sin juzgar, aunque Ć©l niega cualquier acto ilĆcito.
Lula da Silva es el candidato del Partido de los Trabajadores a las elecciones presidenciales de octubre próximo, y de hecho lidera cómodamente todas las encuestas con cerca del 37 por ciento de la intención de voto, pero no estÔ claro cuÔl serÔ el impacto de su encarcelamiento en la estrategia electoral de su formación.