Diversas empresas intentan fomentar el uso de internet e incluir a la mayor cantidad de personas a la red, con el fin de en potencia, obtener mayores bases de usuarios para productos y servicios, tales como redes sociales, plataformas de streaming, etcétera. Sin embargo, los consumidores no siempre reaccionan de la forma esperada.
Un ejemplo de esto son los puntos Wi-Fi gratuitos que se encuentran instalados en Nueva York, instalados por la empresa LinkNYC.
Esta iniciativa planteó convertir alrededor de 300 cabinas telefónicas en quioscos tecnológicos, con Wi-Fi gratuito, carga vía USB, entre otras funciones.
Sin embargo, con el paso del tiempo y la información recabada sobre el uso de estos quioscos, los datos parecen indicar que el Wi-Fi gratuito ha sido utilizado en mayor medida para ver pornografía en plena vía pública.
De acuerdo con New York Post, la mayor parte de las personas que han sido captadas consumiendo contenido pornográfico gracias al Wi-Fi gratuito, son homeless o vagabundos.
El problema ha comenzado a cobrar notoriedad en las calles de Nueva York, y de acuerdo con la policía local, ver porno en público no está catalogado como un delito, por lo que las acciones contra los usuarios que lo realizan son limitadas.
En días recientes, McDonald’s tomó medidas contra un problema similar, y es que de ahora en adelante, las redes Wi-Fi de sus sucursales bloquearán las conexiones a sitios pornográficos, lo cual podría ocurrir también con servicios como el de LinkNYC o similares.