• La capacidad que tienen los mercadólogos de desarrollar pautas cada vez más innovadoras estudian más y más al consumidor, para entenderlo desde su realidad de mercado.

• Los estilos de vida se han definido como la pauta mediante la cual se determina el ritmo que debe tomarse, para poder generar empatía ante el consumidor.

• Hay un constante cambio en los hábitos de los consumidores y esto obliga a implementar nuevas pautas comerciales, a través de las cuales puedan determinar nuevas tareas que ayudan a perfilar al consumidor.

Los cambios de hábitos de los consumidores han establecido acciones comerciales, que se han tenido que adaptar a las tendencias del mercado, que ayuden a perfilar al consumidor actual y con base en ello poder establecer nuevas tareas.

Mediante estos estilos de vida que se han definido, se ha creado una pauta en que la empatía entre el consumidor y la marca parece mejorar.

De hecho ahí radica la capacidad que han encontrado los mercadólogos, de poder establecer acciones a través de las cuales se identifiquen los estilos de vida de los consumidores y no solo eso, determinar acciones que ayuden a explotar las pautas comerciales.

Un estudio de Bank of America Merrill Lynch encontró que el 30 por ciento de los millennials encuestados reconoció que consume menos alcohol. De ellos, el 35 por ciento aseguró que ya no bebía de ningún tipo de bebida, mientras que el 27 por ciento de ellos dijo que bebía menos alcohol y 12 por ciento dijo que consumía menos vino.

El dinamismo que ha caracterizado al mercado millennial ha obedecido a la adopción tecnológica con la que cuenta y al número de consumidores que se han multiplicado, gracias al desempeño que han alcanzado como una pauta que es indispensable entender para comprender desde qué perspectivas se abordará este amplio segmento.

Un elemento que ha diferenciado al segmento millennial es el constante cambio de hábitos y la influencia que tienen para modificar su comportamiento.

En esta medida es que se han podido establecer estrategias que cada día más parecen entender el rol que juega el consumidor en función de los estilos de vida con que cuenta.

La realidad del mercado es una de las grandes métricas en mercadotecnia, pues a través de medir lo que ocurre dentro de este se pueden establecer normas de gran interés para el consumidor o por el contrario, marcar líneas de trabajo que logran influir en la manera en que se gestionan los departamentos en una organización.

Es indudable que los hábitos de los consumidores cambian y están en constante evolución, sin embargo, también es necesario entender qué motiva estos cambios y de qué manera se pueden aprovechar para poder crear estrategias favorables para las marcas.

Los estilos de vida son otro de los grandes insights que al ser estudiados, nos logran revelar hábitos de los consumidores a partir de los cuales podemos definir intereses específicos que logran trascender en el mercado.

Estos intereses son de especial relevancia, sobre todo cuando nos percatamos de que hay cada vez más un forma de entender desde distintas perspectivas a los consumidores, quienes reaccionan ante ciertos aspectos que determinan una decisión de compra, sobre todo cuando esta logra ser medida mediante emociones, reacciones a contenidos virales, entre otros aspectos que se han desarrollado entorno a este segmento.