Un elemento que se integró a las estrategias del marketing publicitario y político con el advenimiento de la internet es el meme, mismo que ya forma parte de la cultura popular. Es una expresión que incluso ha llevado a la conformación de agencias dedicadas a su comercialización y es también un modus vivendi para algunos comunicadores.
Si bien los memes como se conocen en la actualidad son producto de esta era digital, en la que es posible manipular imágenes, textos, audios y otros elementos multimedia, el concepto de estos divertidos medios de expresión nos refiere a la década de los 70 del siglo pasado.
“El concepto de meme es una referencia de orden teórico de la categoría que desarrolló Richard Dawkins en 1976, en su libro ‘El gen egoísta’, en el que plantea que el meme es una idea básica de la transmisión de la cultura.
Los memes corren como agua en internet. Casi cualquier situación o suceso es propicio para que éstos nazcan y proliferen. Son creativos, graciosos, virales, pero sobre todo irreverentes; sin duda un producto que llegó para quedarse. En México se encuentra en una etapa de profesionalización y sofisticación.
“En términos concretos es un comportamiento, una idea, alguna conceptualización simbólica que se va a expandir y se va a reproducir en el orden cultural para reconfigurar la forma de entender la realidad, de pensarla o percibirla”, según el comunicólogo Jorge Alberto Hidalgo Toledo, quien también señala que durante el auge de los medios análogos como lo son prensa escrita, televisión y radio, estas expresiones estuvieron presentes, “pero se reproducían como ideas, estructuras de pensamiento, y lo que hicieron las redes sociales fue darles visibilidad”.
Lo que empezó siendo una diversión, ahora se hizo algo serio y profesional. Hay personas que pasan el día captando momentos para convertirlos en memes, mientras que a otros las actividad les viene natural, y bajo la menor provocación ya están ideando su próxima intervención. Tal ha sido la evolución de este género, que ya se imparten talleres sobre el tema en el Museo Nacional del Arte (Munal), aprobados por el Instituto Nacional de las Bellas Artes (INBA).
También hay talleres donde se aborda la historia del meme, desde sus orígenes hasta la actualidad, así como la ética, cómo aplicarlos y adaptarlos a cierto tipo de público porque todos son muy diferentes. Una docena de profesionales de diversas áreas como el diseño, el periodismo y la historia del arte, Integran el Instituto Nacional de Bellos Memes (INBM), en el cual se imparten cursos sobre el tema, con lo que buscan hacer una aportación a la cultura.
Los memes son materiales de fácil reproducción, que pueden ser virales, lo que responde a que tienen como base el humor, ya sea negro, satírico, irónico o blanco, ya que en la actualidad la sociedad vive en una lógica de la cultura participativa.
Además, se conciben para generar notoriedad, recordatorio, referencia a una experiencia personal o influir en alguna opinión o idea.
Es un hecho que en el futuro, los memes seguirán invadiendo los dispositivos electrónicos de la gente con irreverentes expresiones que harán estallar sus risas. Según expertos, es probable que se agreguen otros elementos a la producción de los memes, por lo cual vaticinan que este género no desaparecerá.
Los memes son una buena herramienta de comunicación y algunos una verdadera expresión artística.