Los maniquíes representan una efectiva forma de mostrar las prendas que una marca comercializa. Asimismo han servido como un canal de comunicación al consumidor y como el reflejo de la personalidad de cada compañía. Pese a esto las figuras se mantienen con una expresión facial desmotivadora.
De acuerdo con Ed Nobel España, los maniquies suman importancia visual e impulsan el interés del consumidor en determinadas prendas que, en general, son las de determinada temporada. Asimismo se afirma que tienen importancia en las ventas a causa de la exposición de cierta mercancía.
Pese a su importancia existe una tendencia en implementar maniquies que lucen tristes o que carecen de expresión facial, ejemplo de esto son Zara, El Corte Inglés, Palacio de Hierro y Macy’s. Es conveniente agregar que, en algunos casos, el tema también se lleva a las modelos de sus catálogos de ropa.
La razón de mostrar prendas de ropa en maniquies sin expresión relevante es para que el consumidor le preste mayor atención a la mercancía y deje de lado al cuerpo que la porta. Y aunque lo mejor es que estas figuras se apeguen al molde del consumidor, marcas como Abercrombie & Fitch y La Perla han tenido percances por la extrema delgadez que implementan en ellos.
Por su parte compañías como JC Penney apuestan por maniquies inspirados en personas reales bajo la campaña ‘When it Fits, You Feel it’. Que engloba la forma de una mujer basquetbolista, un hombre con prótesis en las piernas, una madre de talla extra grande, un hombre con Enanismo (Acondroplasia) y una mujer en silla de ruedas.