2019 fue sin duda un buen año para el cine a nivel mundial pese a que los números registrados fueron menores a los de 2018, según lo refiere una comparativa desarrollada por Forbes. Aun con ello, durante los pasados meses fuimos testigos de varios logros que se obtuvieron en distintas fechas, por ejemplo, el posicionamiento de Avengers: Endgame como la película más taquillera de la historia o la creciente presencia y consolidación de las plataformas de streaming con piezas dignas de competir en las máximas galas de la industria. Para distintos estudios y distribuidoras las ganancias en taquilla fueron sumamente representativas, como ocurre en el caso de Disney que se quedó con 7 de las 10 películas más taquilleras del año, sin embargo también hubo fracasos del cine que puede que a partir de ahora se vuelvan representativos.
A continuación veremos algunos de ellos junto con sus cifras, según un listado elaborado por Variety, así como las lecciones que sus fallos dejan para las marcas en general, no solo las involucradas en el cine.
Los grandes fracasos del cine en 2019
- X-Men: Dark Phoenix
Como primer gran fallo en las taquillas de 2019 está la última entrega de la saga de los X-Men, Dark Phoenix, ahora perteneciente a Disney. Esta cinta que contó con la presencia de actores como Sophie Turner, Jennifer Lawrence, Michael Fassbender y Jessica Chastain, tuvo un presupuesto de producción de 200 millones de dólares, no obstante, en las taquillas apenas logró recaudar 252 millones de dólares a nivel global, por lo que se podría entender que las ganancias se quedaron cortas en comparación con lo invertido. Sin embargo, según lo destaca la fuente, considerando los costos de marketing de la cinta, al final de cuentas representó una pérdida de 120 millones de dólares.
Para Disney sin duda esto no fue nada agradable por lo que a raíz del fracaso decidió eliminar algunos proyectos que ya tenía en puerta tras la adquisición de 21st Century Fox. Por suerte, y pese a lo ocurrido, los “mutantes” aún están en los planes de Disney y el Universo Cinematográfico de Marvel.
- Terminator: Dark Fate
El más reciente intento de Paramount Pictures por revivir el universo de Terminator no brindó los resultados esperados en la taquilla pese a la fórmula a la que recurrió, sumando nuevamente a Arnold Schwarzenegger y Linda Hamilton, por ello fue el segundo de estos fracasos del cine. El costo de producción de la cinta ascendió a 185 millones de dólares, sin embargo, la recaudación en las taquillas globales apenas logró superar esa cifra quedando en 260 millones dólares.
La cinta no tuvo tan malas calificaciones por parte de la crítica o del público, sin embargo, este universo perdió su encanto hace muchos años y su antigua entrega (Terminator Genisys) no dejo el mejor precedente.
- Hellboy
Considerando la popularidad de las películas de superhéroes en la actualidad, Hellboy parece que se quedó como un caso aparte pues su fracaso se dio ante la crítica y ante el público. Este reboot, en el que Guillermo del Toro ni Ron Perlman tuvieron algo que ver, tuvo 50 millones de dólares a su disposición, sin embargo, apenas logró un 17 por ciento de aprobación en sitios especializados como Rotten Tomatoes, siendo una de las cintas peor calificadas del año, mientras que en las taquillas a nivel global apenas logró recaudar 41 millones de dólares.
Para la cinta no fue suficiente contar con la clasificación R o con la presencia de David Harbour, uno de los actores más populares de la actualidad. Según The Wrap, la filmación de la película fue un infierno pues estuvo plagada de luchas internas, desacuerdos e incluso un despido controversial.
Por otra parte, un buen número de fans de este héroe estaban más a la espera de una tercera entrega por parte de Guillermo del Toro en lugar del inicio desde cero que dio la distribuidora Lionsgate.
- Gemini Man
La aparición doble de un actor tan querido y popular como Will Smith no fue suficiente para que esta película lograra buenos resultados en taquilla, según Variety, contó con un presupuesto de 138 millones de dólares, pero solo recaudó 173 millones a nivel global, por lo que se calcula que la creación de esta película representó la pérdida de al menos 75 millones de dólares.
Según varios de los críticos de cine, esta es una película de acción genérica en la que la única diferencia fue el apalancar la tecnología para duplicar al actor.
- Playmobil
La marca alemana que se puede considerar la competencia más directa de Lego no logró lo mismo que esta firma en su llegada al cine. La película de los Playmobil tuvo un presupuesto de 40 millones de dólares, de los cuales apenas logró conseguir 13 millones en taquilla. Su semana de estreno se puede considerar como uno de los peores en la historia al solo recaudar 668 mil dólares.
Según la fuente, gran parte de su fracaso se atribuye al hecho de que, a diferencia de Lego, la marca y sus juguetes no son tan conocidos por las audiencias a nivel mundial y al parecer no uso muchos de sus recursos para darse a conocer.
- Cats
Finalmente, y tal como lo compartimos con más detalle hace una semana, Cats se perfila como otro de los grandes fracasos del cine en las taquillas del 2019. Su presupuesto para producción fue de 100 millones de dólares, contó con muchos rostros conocidos tanto en el mundo del cine como del teatro, sin embargo, a nivel mundial su recaudación se sitúa en los 10.9 millones de dólares.
Las críticas y burlas surgidas desde el lanzamiento del trailer durante el verano pasado y las malas reseñas terminaron sepultado este musical distribuido por Universal Pictures. Además, entre los principales problemas que desataron las reseñas negativas se destaca que no es una cinta fácil de entender o digerir, especialmente si no se ha visto previamente el musical en teatro.
¿Qué se puede aprender de estos fracasos del cine?
Las cintas anteriores son un reflejo de todo lo que puede salir mal aún cuando se cree que se tiene un buen producto, la buena noticia es que gracias a estos fracasos del cine quedan lecciones importantes que los demás pueden aprovechar para no caer en las mismas situaciones. Aquí algunas de ellas:
- No hay que descartar las cosas por completo
En primer lugar, tal como vimos en el caso de X-Men: Dark Phoenix si bien no tuvo los mejores resultados, esto no ha hecho que Disney haya decidido dejar por completo esta franquicia cinematográfica, en su lugar la entregaron a la mente maestra del MCU Kevin Feige, para que encuentre lo rescatable de esta propiedad cinematográfica y poder usarla en el futuro. En ese mismo sentido, las marcas no deben descartar por completo los productos o materiales que creen, algunas de sus piezas o características pueden servir en otros escenarios.
Algo similar se entiende con el caso de Hellboy, es posible que una tercera entrega de la mano de Guillermo del Toro hubiese sido más efectiva en lugar de arrancar nuevamente desde cero con un contenido.
- La nostalgia no siempre funciona
Una de las fórmulas más recurrentes de la actualidad con los contenidos es el uso de la nostalgia. El hacer que la gente recuerde el pasado suele ser efectivo para asegurar el éxito de un contenido, sin embargo esto no siempre es así. El caso más claro es el de Terminator: Dark Fate que ni con los personajes de las primeras películas logró el éxito que esperaba. Aunque puede sonar contradictorio a lo dicho en el punto anterior, a veces es necesario comprender cuándo terminó la vida útil de un producto para dejarlo ahí y comenzar a pensar en otro, solo que para ello es necesario tener en cuenta al consumidor y los datos.
- Hay que hacer promoción
El caso de Playmobil nos muestra que no podemos asumir que todo mundo está familiarizado con nuestros productos o marcas, el asumir las cosas es uno de los peores errores en los que pueden caer los mercadólogos en la actualidad. Tal como lo marca el embudo de ventas, antes de generarlas es necesario familiarizar al consumidor o al menos asegurarse de que ya esté familiarizado para después presentarle mensajes que lo motiven a la compra.
- No todos los contenidos son aptos para otros formatos
El caso de Cats nos deja entender que el llevar algunos contenidos a otros canales u otros formatos no siempre resulta en una buena decisión pese a que esta actividad pueda ser de gran ayuda para darle más distribución a los materiales. Algunos contenidos logran buenos resultados por el formato que tienen y el lugar donde se encuentran, modificarlos puede representar una pérdida de tiempo y recursos.
- Se necesita más de un elemento para tener un buen producto
Finalmente, depender de un solo elemento o característica para el éxito de un producto o contenido puede ser una apuesta arriesgada, sobre todo cuando los demás elementos no cambian o son genéricos. Para Gemini Man, el solo contar con la presencia de una marca personal importante como Will Smith no fue suficiente para que la película lograra buenos números, tal como vimos, lo destacable fue jugar con la tecnología para “duplicar” al protagonista, sin embargo la historia no presentó nada nuevo.