La era ambiental, de la economía y de la eficiencia ha tomado por asalto a la industria de los envases, en donde la idea del tratamiento de los desechos es un tema que preocupa cada vez mas a los mercadólogos.
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El tema ha tomado tanta relevancia desde el año pasado que las vertientes van desde la reutilización de los envases mismos y el aprovechamiento al máximo de los contenidos, a la desaparición de los envases gracias a su preconcepción biodegradable, e incluso, como lo que presenta la firma PK Clean, que es la reconversión de las botellas de PET en el combustible que originalmente fueron.
Así, con estos ejemplos se puede apreciar la manera en la que muchos innovadores en el mundo se han tomado en serio los temas de conservación a los que mercadólogos y publicistas valdría la pena que atendieran, cuando menos por pura curiosidad.
De botella de plástico a combustible
En lugar de reciclar a las botellas de plástico, que es considerado un proceso costoso, una nueva idea pretende reconvertir los envases de PET, el cual es un interesante y más eficiente proyecto conducido por la empresa de Salt Lake City en los EUA, PK Clean.
Priyanka Bakaya, CEO de PK Clean
El proceso que usa PK Clean se denomina despolimerización catalítica, cuyo proceso puede convertir a 9 toneladas de desechos plásticos en casi 9,500 litros de combustible que pueden venderse a las refinerías. Y el objetivo de PK Clean es vender plantas a otros recicladores, con la posibilidad de trabajar directamente con las empresas industriales que producen residuos en masa.
Los envases que desaparecen
La elaboración de empaques que al final de su uso son reabsorbidos por el medio ambiente, son producto del trabajo del diseñador estadounidense Aaron Mickelson, el cual ayudará a los consumidores a generar menos desperdicios derivados de su consumo.
De acuerdo con los datos que ofrece el propio Mickelson en su website, en los EUA cada año se tiran más de 70 millones de toneladas de envases, lo que constituye el mayor porcentaje de la basura en los rellenos sanitarios, y en respuesta a esta problemática que más allá de la Unión Americana, alcanza proporciones mundiales, a través de su tesis, propone eliminar esos residuos en su totalidad, con lo que a continuación presenta sus ideas.
Tide Pods
El empaque es un rollo con pequeñas cápsulas de detergente, con la marca e información adicional impresa, las cuales son solubles en el agua, con lo que se eliminan por completo las bolsas contenedoras.
Oxo POP Containers
Las etiquetas que se incluyen en estos contenedores, que pueden ser de papel impreso o materiales plásticos, se sustituyen por una solución de tinta jabonosa que al ser lavada se elimina.
Twinings Tea Bags
En esta solución lo que se elimina es la caja de cartón y la envoltura de celofán que suele contener a las bolsitas para infusiones. En cambio, lo único que tiene que hacer el consumidor es despegar la bolsa empacada del pequeño acordeón de bolsas, en donde además también se puede imprimir información de la empresa. En este caso, queda un pequeño desperdicio, pero se eliminan 1.2 toneladas de basura por cada camión recolector.
Nivea Bar Soap
La envoltura de la barra de jabón es elaborada de papel soluble en agua, de modo que los consumidores pueden meter el paquete completo a la ducha con ellos y de inmediato la caja desaparecerá ante sus ojos.
GLAD Trash bags
Un poco similar a las cápsulas de detergente, con las bolsas de basura se crea un rollo hecho con las mismas bolsas y al final, con la última bolsa se queda pegada la etiqueta de manera que se ahorran 1.5 toneladas de cartón.
Imágenes vía The Dissapearing Package
Jar with a twist (JwaT)
Y por último, vale la pena recordar el Jar with a twist que es de esos productos además de ser una propuesta ecomigable, también promete brindar un gran servicio para sacar la última parte útil de la mayonesa, mermelada, mostaza, crema de cacahuate (maní), cajeta (dulce de leche de cabra), etcétera.
El mercado de JwaT apunta a los fabricantes mayoristas y minoristas de alimentos en conservas y abarrotes para licenciar el concepto, justo como Tetrapak ha hecho en la industria de bebidas.
Durante el diseño del envase, primariamente se ideó un mecanismo similar al de los desodorantes, no obstante, el tornillo central dificultaba su aplicación en contenido con mayor fluido, de manera que derivaron en un nuevo sistema que depende de las paredes del contenedor. Así, la base rotatoria sube gracias a los canales en espiral del contenedor, mientras el usuario le da vueltas muy simples