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Este cambio en la plataforma de cobro de Uber llega después que se implementaran cambios a la ley laboral en California
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Bajo esta nueva legislación, las marcas deben darle un salario y beneficios a los colaboradores esenciales para su negocio
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Sin embargo, la plataforma de taxis compartidos asegura que sus socios conductores no son parte crucial de su estrategia
Gracias a las plataformas digitales, la economía compartida ha podido despegar de una forma que antes parecía inusitada. A través de marcas como Uber, Lift y Cabify, los usuarios tienen una alternativa a los taxis convencionales, no siempre tan queridos. Gracias a proyectos como Airbnb, el turismo es una actividad dolorosamente asequible para ciertos agentes. También en el sector financiero se pueden contar plataformas de préstamos, inversión y otras actividades.
Sin embargo, que tenga una amplia aceptación entre el público no significa que no tiene retos. Los taxis compartidos, principalmente Uber y Lyft, han tenido salidas a la bolsa que podrían cambiar por completo el mercado, según Market Watch. De acuerdo con Medium, no todas las propuestas que llegan a aparecer en este sector de hecho tienen un futuro productivo. Y según Born2Invest, su funcionamiento recae peligrosamente en la confianza entre todas las partes.
Pero un problema que se ha vuelto especialmente preocupante en esta economía es el de la remuneración. Como regla general, este tipo de servicios se cobran por medio de un algoritmo diseñado por la plataforma que conecta a usuarios con proveedores. Hay excepciones, como en las propiedades de Airbnb. Pero en sitios al estilo de Uber, ésta es la forma en la que todo el mundo espera que se comporten los precios. Sin embargo, esto podría cambiar muy pronto.
Uber dejaría a conductores poner el precio de los viajes
De acuerdo con The Washington Post, la compañía de taxis compartidos más grande del mundo inició una fase de pruebas para un nuevo sistema de cobro. En este nuevo esquema, Uber ya no decidiría cuánto deben pagar los usuarios del servicio a través de un algoritmo. Ahora, serían los mismos socios conductores los que pondrían el precio a pagar por el viaje. Con esta opción, las personas pagarían hasta cinco veces más lo que marcaría la compañía.
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Estas pruebas están limitadas a conductores que dan viajes en Santa Barbara, Palm Springs y Sacramento, en California. El sistema de Uber dejaría a los conductores incrementar, de 10 por ciento en 10 por ciento, la tarifa que deseen ganar por viaje. Así, los socios con precios más bajos serían los que reciban a los primeros usuarios. Pero según The Verge, conforme vaya en aumento la demanda, eventualmente también recibirán clientes aquellos con costos más altos.
¿Propuesta de éxito o problema a futuro para la compañía?
La remuneración y las ganancias a través de las plataformas digitales son un desafío no solo para Uber y sus conductores. Fraudes y falta de seguridad afectan a toda la industria de la publicidad programática. Debido a la falta de resultados, ciertos distribuidores de contenido están cerrando canales de ingresos para sus antiguos socios. Asimismo, agentes de diferentes sectores están en una lucha eterna por acaparar presupuestos que vienen de la misma fuente.
En el contexto específico de Uber, la compañía de taxis compartidos ya tiene mucho sobre su plato. De acuerdo con The Drum, la empresa tuvo que retirar su unidad Eats de India luego de decidir que sus ganancias no eran suficientes para mantener presencia en este mercado. Si a eso se le suma que, desde su salida a la bolsa, tuvo un desempeño deplorable como marca pública, es claro que debe darle una vuelta a su negocio. Esta iniciativa es un intento de ello.
Sin embargo, no es claro si esta iniciativa será el arma que busca Uber para mejorar su situación económica. La tarifa dinámica es uno de los proyectos que más desagrado genera entre su público de usuarios, y esta iniciativa podría deshacerse de este cobro. Sin embargo, dejar que los conductores escojan los precios también sería una forma de lavarse las manos. Y una que, además, no es seguro que vaya a ser bien recibida entre todos los consumidores.