Durante 2016, los equipos que participaron con autos en Fórmula Uno ganaron más de 860 millones de dólares, entre los que destacaron marcas como Ferrari, Mercedes, Red Bull, Williams, McLaren Honda, Force India, Renault, entre otros.
Parte del negocio de Fórmula Uno son los patrocinadores de la compañía organizadora y de cada escudería, y es que hay algunos autos que cuentan con más de 20 patrocinadores. De acuerdo con Bloomberg, hay alerta roja en la compañía porque solo tienen cinco anunciantes corporativos, mientras Nascar tiene 43.
Mientras escuderías como McLaren o Ferrari cuentan con 28 patrocinadores corporativos, la Fórmula Uno solo ha experimentado el exilio de anunciantes, por lo que ahora cambiarán de estrategia, como el crecimiento de su presencia en línea, mientras que para generar engagement la compañía quiere llevar carreras a las principales ciudades del mundo, es decir, incentivar la apertura de nuevos circuitos.
Y es que en los últimos años, la Fórmula Uno reemplazó circuitos tradicionales de Europa, donde estaban gran parte sus anunciantes, por pistas en lugares remotos como Bahrein, Bakú en Azerbaiyán o Sochi, en Rusia, mientras que cuando el circuito de carreras quiso retornar a países europeos resultó que los honorarios por correr carreras ahí ya eran más altos.
La Fórmula Uno está rediseñando sus estrategias para atraer a nuevos anunciantes desde que el multimillonario de Estados Unidos, John Malone, la comprara hace unos meses por 8 mil millones de dólares. Además, la audiencia de dicho certámenes deportivos son de 400 millones de personas en todo el mundo.
Según Bloomberg, la Fórmula Uno quiere seguir el modelo de marketing de los equipos de fútbol europeos, Liverpool y Manchester United, quienes tienen 30 y 90 patrocinadores, respectivamente.