Tenemos 7 segundos para dejar una primera impresión. Esto lo sabemos y lo hemos escuchado repetidamente, sin embargo pareciera que necesitamos que nos lo recuerden de forma constante.
¿Cuántas veces no te has visto totalmente decepcionado por esa primera impresión de alguna persona en atención y servicio al cliente? ¿Alguna vez te han presentado a alguien que muestra más interés por lo que hay en su entorno que por conocerte?
Como dice Tom Peters: …que nos recuerden no sólo el poder de la primera impresión, sino la necesidad de aprender la ciencia y el arte de construir, ejecutar, mantener los comienzos fantásticos.
Algunos tips para lograr comienzos fantásticos:
1. Irradia energía: Proyecta entusiasmo cuando conozcas a alguien, no sólo con tus clientes, también con tus proveedores, colaboradores o cualquier persona que conozcas. Una sonrisa muchas veces puede hacer la gran diferencia, y como ya lo he mencionado en ocasiones anteriores, la gente se acordará mejor de ti (incluso de tu nombre) si sonríes y eres entusiasta.
2. Tus primeras palabras: Sin duda, la primera impresión tendrá que ver con tu actitud, tu postura y como dijimos la energía que irradies, sin embargo las primeras palabras y el tono que utilices serán también cruciales para ganar credibilidad y generar un impacto positivo. Frases positivas y optimistas causarán en tu interlocutor apertura y empatía. El tono de voz es importante, de nada sirve que digas que hace un día estupendo con desgano y apatía.
3. Muestra interés: Mirar directamente a los ojos de las personas cuando nos las presentan o cuando estamos dando un servicio es muy importante. No hay nada más desagradable que alguien te salude y que al mismo tiempo esté más atento de otras situaciones, otras personas u otras cosas. Respetar el momento de la introducción, ser amable y cordial son valores que todos apreciamos. Si quieres hacer buen marketing asegúrate que tanto tú como tus empleados proyecten siempre los siguientes mensajes: ¡Me interesa conocerte! ¡Me interesa resolver tu problema! ¡Me interesa servirte!
4. El momento del adiós: Así como hay que cuidar los comienzos fantásticos hay que trabajar también en las despedidas fantásticas. ¿Te ha sucedido que todo parece marchar de maravilla a la hora de comprar algo pero a la hora del cierre el vendedor parece estar más interesado en tu chequera? Y peor aún, cuando la venta se concreta, el trato del vendedor es radicalmente distinto. ¡Qué mala impresión nos llevamos! ¿Cierto? Tendemos a recordar el principio y el final de los eventos, las situaciones y las conversaciones. Por lo tanto si ya hiciste un esfuerzo por generar una buena primera impresión, cuida el mensaje que darás al final, cuida tus palabras, tu postura, tu sonrisa, tu actitud. Y trabaja arduamente en un final fantástico también.
Tom Peters dice: Necesitamos aprender la ciencia y el arte de construir, ejecutar y mantener los comienzos fantásticos, yo digo que la primera impresión, si así lo deseamos, puede evitarnos muchos futuros tropiezos. Es una llave maestra que tiene el poder de abrir las puertas, de par en par, a nuevas oportunidades y grandes comienzos.
Besos azules
