Como bien dijo el escritor e historiador oaxaqueño Andrés Henestrosa “un dicho y un refrán suelen concretar situaciones y abrir ante nuestros ojos un rumbo, poner en nuestra voluntad una decisión, decidir un paso inicial. Y no de modo caprichoso o casual. Los dichos y los refranes son el resumen de la sabiduría humana acumulada en muchos años de experiencia”.
Hace un par de semanas inicié un stream por Facebook Live y tomé de referencia en el título un refrán, de ahí la inspiración a crear esta columna. Ya que además de ser sabios los dichos y refranes son un excelente recurso cuando alguien entra en una discusión para defender sus argumentos ya que son “indiscutibles” y de uso común.
Siempre existe un refrán para cualquier situación, y para cualquier refrán hay un contra refrán, pero aquí te comparto algunos refranes que aplican muy bien a la creación de una imagen y marca personal:
- Santo que no es visto, no es adorado. Si las personas no saben de ti y lo que realizas, nadie te contratará o solicitará tus servicios. La publicidad también se aplica en las personas.
- Echarle mucha crema a sus tacos. En ocasiones es bueno exagerar nuestros éxitos para generar mejor impresión y expectativa. Utilizarlo es un arma de dos filos si tus habilidades no están a la altura de la situación.
- El que con lobos anda, a aullar se enseña. Las personas con quien te reúnas aportarán algo a tu vida, aprende de ellos. Rodéate y convive con gente exitosa que tenga tu misma visión y valores.
- Nadie es monedita de oro. Al desarrollar tu marca personal serás más visible, a mucha gente le caerás bien por ser honesto en quien eres, pero por la misma razón le vas a caer mal a otros, acostúmbrate a eso.
- El que es gallo, donde quiera canta. Si eres bueno en algo en cualquier parte lo serás, no des excusas mediocres de tus errores, mejor busca la solución a ellos. Se vale pedir ayuda de personas internas y externas.
- Chocolate que no tiñe, claro está. Las cosas deben resultar claras y evidentes por sí mismas, no dejes que las cosas queden entre dichas o se presten para una confusión. Al igual aplica con tus actitud ante todo, deja en claro quién eres.
- Crea fama y échate a dormir. Una vez gestionada tu marca personal las personas hablarán de ti, ya sea positivamente o negativamente, de ti depende que huella quieres dejar en los demás, y no solo la huella sino la forma y profundidad de ella.
Si aún no encuentras tu misión y te equivocas en tu vocación siempre hay tiempo para ser uno mismo; lo mismo pasa cuando las encuentras y no cumples con tus metas o expectativas, recuerda que hasta “al mejor cocinero se le quema la sopa”, lo que no se vale es quedarse conforme con lo que se tiene.
“Para gestionar adecuadamente la marca personal, es indispensable el autoconocimiento de las virtudes y demonios de uno mismo”. –Miguel Moya