Si ponderamos las ventajas y desventajas del uso de las redes sociales, seguramente obtendremos una conclusión de que han cumplido cabalmente su objetivo, que es el de ser un medio de comunicación eficiente, de enormes magnitudes, que acerca a la gente que está lejos, pero que también puede alejar a la gente más cercana por ser un distractor dentro del núcleo familiar, en la escuela y en las empresas.
Por el momento no existen escuelas o expertos que profundicen en el aspecto ético sobre el uso adecuado de las redes sociales, el enfoque que están dando es en relación con el aspecto técnico y su aprovechamiento dentro de las escuelas o en los centros de trabajo. Debido a lo anteriormente señalado, tendremos que exigir que en las escuelas se establezca dentro de sus programas de estudio, un apartado especial donde haya una creación de conciencia en los alumnos, sobre el uso correcto de las redes sociales, para que tengan la capacidad de distinguir y de tomar mejores decisiones respecto al manejo de redes sociales.
A continuación mencionaré algunos de los daños colaterales que nos están dejando las redes sociales y que seguramente estaremos en posibilidad de corregir para que no sigan ocurriendo:
1. Mala ortografía
Con la llegada de las redes sociales, hemos aprendido a escribir con grandes faltas de ortografía, con errores de redacción, con abreviaturas, que lo único que ocasionan es una deformación del lenguaje, de un lenguaje que es tan bonito si se escribe de la manera correcta. Ahora todo mundo se escuda en que todos lo están haciendo mal y que lo único que hacen es seguir una tendencia, por lo que si no la sigues estás fuera de una moda tecnológica que estamos interpretando de forma incorrecta.
2. Ejercicios de memoria
En otra época, sin tantos avances en tecnología, los ejercicios de memorización eran tan buenos al no tener que recurrir a una tablet, a un smartphone, o a una lap top para aprenderse cosas tan sencillas como una lista de teléfonos, cálculos matemáticos, frases en libros; y ahora pues con simples mensajes en las redes sociales los puedes obtener sin necesidad de poner a trabajar esa grandiosa máquina llamada cerebro. Ahora con tan solo apretar un botón nos está facilitando la pereza mental tanto en escuelas como en las empresas.
3. Falta de atención y de respeto
Hay personas que se consideran tan avanzadas en estas cuestiones de las redes sociales, que no se dan cuenta de que están cometiendo tremendas faltas de educación, pues no son capaces de sostener una conversación amena en lugares como el hogar, el trabajo y restaurantes por mencionar algunos, debido a que demuestran poco respeto y una falta de atención a la demás gente que los rodea, pues es para ellos más importante contestar sus mensajes de redes sociales que prestar la adecuada atención a la gente que está sentada a su lado, Inclusive hay personas que durante las juntas de trabajo tienden a suspender su participación o cortan el flujo de la junta para atender sus redes sociales.
4. Es más fácil bulear a través de las redes sociales
El también llamado netbullying, que no es otra cosa más que el acoso que se da a través de redes sociales para tratar de fastidiarle la existencia a otra persona, también corresponde a otra consecuencia de estar en redes sociales, porque ahora es más sencillo agredir, amenazar, humillar y desprestigiar a otros, sin a veces pensar las graves consecuencias y daño moral, social y psicológico que pueden causar en otro ser humano. Lo más grave de todo es que hay gente que celebra y festeja que se den este tipo de prácticas.
5. Más seguidores = Menor humildad
Estamos viviendo una época en donde da más orgullo decir que se tienen más seguidores que amigos; el ego de los que quieren tener la mayor cantidad de seguidores en redes sociales aún y sabiendo que son comprados o de dudosa procedencia no tiene comparación con nada, se fomenta el narcisismo, de tal forma, que después bajarlos de su nube resulta una cuestión francamente complicada.
6. Crean una gran adicción
Las redes sociales pueden ser tan adictivas como una droga, como un café, como un refresco de cola, que tratar de eliminarlas de nuestras vidas resulta prácticamente imposible, por lo que no queda de otra más que moderar su uso. Se está creando una dependencia incontrolable entre usuarios y redes que ni siquiera se tiene conciencia de las horas que le invierten al día, pero lo peor de todo es que al estar muchas horas frente a una máquina les puede causar problemas serios en su rendimiento escolar, en su desempeño laboral y hasta en su salud física.
A manera de conclusión podemos señalar que el boom de las redes sociales nos ha dejado grandes avances en materia de comunicación, de relaciones personales, de difusión de nuestros productos, de un medio de llegar al consumidor, a los lectores y prácticamente a cualquier contacto que uno quiera tener, pero que, también están causando efectos colaterales que la gente no está observando, o que no quiere observar, como la pérdida de habilidades de poder escribir sin faltas de ortografía o abreviaturas, leer de manera correcta, diferenciar entre una amistad verdadera y una virtual, lo cual por supuesto resulta muy triste.