Durante esta semana, una ejecución publicitaria de Sears se convirtió en objeto de burlas y criticas por parte de usuarios de redes sociales. En ella se ve a dos jóvenes que posan en el metro de la Ciudad de México.
Desde el encuadre de la fotografía y el retoque de la misma, hasta el piso del escenario fueron objeto de comentarios y criticas por parte de los seguidores de la marca quienes no repararon en hacer notar la falta de coherencia de la marca con la realidad del consumidor.
Con comentarios que denuncian la “falsedad del concepto”, la ejecución de la marca se transformó en un reclamo a la marca por “olvidar” quien es su target y trata de retratar un “ambiente de urbanismo” que, a decir de las audiencias, no existe y está lejos de la realidad del día a día.
Hasta el momento, dicha publicación ha generado 6 mil 277 reacciones, ha sido compartida 287 veces y 434 comentarios, en donde la mayoría son criticas a la creatividad presentada.
Leer el contexto no sólo adaptarse
El principio de esta ejecución es claro; la marca intentó buscar un lugar común para aquellas audiencias que desea conquistar. El contexto intentó ser parte de la comunicación lo que tiene sentido si consideramos lo importante de esto para tener resultados satisfactorios.
En este sentido, se prevé que los esfuerzos de comunicación y mercadotecnia que se relacionan con el contexto de las audiencias meta son 63 por ciento más eficaces que aquellos que no toman en cuenta este elemento, de acuerdo con un reciente estudio firmado por Zefr.
No obstante, la firma parece haber olvidado leer con claridad dicho panorama lo que se tradujo en un mensaje deficiente, forzado y, sobre todo, falso, cuando menos a los ojos del consumidor.
Así, es importante mencionar lo dicho por Gary Vaynerchuk quien afirma que mientras el contenido es el rey, el contexto es dios, con lo que es vital entender al cliente, respondiendo a preguntas como quién nos usa, para qué nos utiliza o en qué momentos se relaciona con la marca; esto es el primer paso en el entendimiento del contexto. Si no comprendemos esto será difícil construir mensajes claros y coherentes que impulse los objetivos de la firma.