En otras oportunidades,Ā le he hecho saber que el campo es un gran maestro, ya sea por el liderazgo con que el agricultor actĆŗa ante un sinnĆŗmero de imponderables, por la cantidad de aspectos que no se pueden controlar y porque la agricultura estĆ” asociada todo el tiempo con el manejo de riesgos. Y en adiciĆ³n a esto, debo reconocer que la competencia tambiĆ©n es fuente de aprendizaje.
MĆ”s allĆ” de la constante lucha que se gesta en el surco para ganar y merecer la preferencia de los productores de alimentos en nuestro paĆs, es necesario hacer una pausa para entender lo mucho que podemos obtener al observar acciones, planes e incluso comportamientos propios de la cultura organizacional de compaƱĆas que operan en la misma industria que nosotros, incluso para ganar distancia y con ello, lograr diferenciar nuestra propuesta de valor.
LO QUE PODEMOS APRENDER DE LA COMPETENCIA
Entendiendo el rol de nuestra marca: FrustraciĆ³n, enojo e inconformidad provocaba en la fuerza de ventas, la agresiva lista de precios que habĆa lanzado nuestro principal rival comercial en una de las regiones donde nuestro liderazgo era muy marcado.Ā
Siempre respetando que la competencia puede ādespertarā de su letargo ya sea porque lance un producto innovador o porque su propuesta de servicio sea realmente diferente, la razĆ³n nos asistĆa a quienes habĆamos diseƱado el plan ya que bajar 5% los precios contra el aƱo anterior, no solo era una tĆ”ctica ilĆ³gica y totalmente replicable, como un barril sin fondo, sin embargo para nuestro competidor era una acciĆ³n funcional pues ellos estaban conscientes del rol que jugaban en ese segmento de mercado y nosotros incluso tuvimos la tentaciĆ³n de seguirlos por miedo a salirnos del alcance del consumidor.
Si bien no soy fanĆ”tico de tocar el precio como mĆ©todo de conquista de clientes, entiendo que la necesidad de una marca en la bĆŗsqueda de ganar mercado dada su baja participaciĆ³n, no es ni debe ser la misma que aquellas que pretenden defender su posiciĆ³n en el mismo.Ā
En resumen: Si no sabe el objetivo que su marca o producto debe perseguir en un segmento especĆfico, se va a dejar llevar por la presiĆ³n interna y externa al tomar decisiones estratĆ©gicas y va a perder.
Experimentar en cabeza ajena: En una sesiĆ³n de anĆ”lisis de la competencia dentro de un panel de inteligencia de mercados, le pedimos a un grupo de representantes de distintas regiones del paĆs que nos apoyaran a ādibujarā la manera en que nuestros dos principales competidores llegaban al mercado, cĆ³mo tenĆan configurado su esquema de descuentos, la remuneraciĆ³n a su fuerza de ventas, etc.Ā
El resultado de ese diseƱo, fue darnos cuenta de la inconsistencia que presentaban en cuanto al modelo comercial e incluso, notamos que cada aƱo hacĆan cambios enormes en la logĆstica, el servicio al cliente, entre otras Ć”reas, todo esto en combinaciĆ³n con investigaciĆ³n de campo que reflejaba que el mercado agrĆcola valoraba la certidumbre precisamente por ser un elemento poco comĆŗn en la dinĆ”mica estructural de este negocioā¦ asĆ que cometĆan un doble error.
Esto refuerza la idea de que, si bien es muy valioso el lanzamiento de nuevos modelos de atenciĆ³n al cliente, a veces basta con mejorar los esquemas actuales para garantizar que entregamos lo bĆ”sico sin complicar la experiencia del cliente.
En resumen: Desatender las experiencias negativas que vive el competidor, es tan malo como ignorar la retroalimentaciĆ³n del cliente.
La anti – segmentaciĆ³n: El desperdicio de recursos por no tener una adecuada planeaciĆ³n, el desbalance de tiempo que se invierte en un cliente que puede re comprar anualmente contra uno que jamĆ”s ha estado en nuestra cartera e incluso el proveer crĆ©dito a potenciales clientes que en realidad tienen un mal historial de pago, son consecuencias de ātirarle a todo lo que se muevaā como se dice en el argot de la cacerĆa.
Hay una enorme diferencia entre no negar el servicio a los clientes pero teniendo claro a cuĆ”l segmento debemos enfocar nuestras baterĆas como organizaciĆ³n contraĀ tratar de vender a toda costa, lo cual Ćŗnicamente resolverĆ” el corto (cortĆsimo) plazo.
El papel de Marketing en la gestiĆ³n comercial es fundamental, pues siempre se requiere hacer un push muy fuerte para erradicar la tan nociva ley del menor esfuerzo pues claramente, es mĆ”s complejo administrar el largo plazo que ceder a las necesidades inmediatas bajo la falsa creencia de que es el Ćŗnico recurso que tenemos.
En resumen: Definir el objetivo desde el inicio de una campaƱa agrĆcola por ejemplo, es primordial para dar guĆa a los esfuerzos de la talentosa fuerza de ventas, aunque en el camino āse valeā ajustar.
Sembrando ReflexiĆ³n
El efecto mĆ”s oscuro de competir, es cuando dejamos a un lado al factor mĆ”s importante: el cliente. Si las acciones que emprendemos se enfocan en vencer a nuestros adversarios comerciales y no a servir eficientemente a quienes buscan nuestros productos y servicios, Āæadivine quiĆ©n va a ser el perdedor de esa contienda?
Me encantarĆ” conocer sus reflexiones en @soyjuanbecerril y seguir aprendiendo del cliente, de nuestros errores e incluso, de la competencia.