España.- Aunque la moda es un sector en el que las tallas grandes en muy pocas ocasiones son contempladas, lo cierto es que cada vez hay más firmas que pretenden llegar a todo tipo de público y que ofrecen prendas de ropa para personas con algún kilo de más. Tal es el caso de la cadena de supermercados Lidl que, ahora, en España, ha anunciado en su catálogo que las personas que utilizan una talla grande podrán conseguir ropa en sus supermercados.
En concreto, la colección de ropa de talla grande que Lidl ha presentado está compuesta por túnicas, vestidos, leggings piratas y sujetadores para las mujeres curvy. Las prendas estarán disponibles desde la talla 46 a la 54 y de la 100D a la 110D en el caso de los sujetadores y todas las prendas tendrán una variedad de tres colores y su precio, como en todos los productos de Lidl será una de sus bazas ya que no superarán los 10 euros.
Pero, no solo para mujeres está disponible esta nueva colección de Lidl sino que los hombres que utilicen una talla grande pueden también renovar su armario en la cadena de supermercados alemana. Así, ellos pueden encontrar polos, bermudas, camisetas, bóxers y bermudas vaqueras desde la talla XL hasta la 4XL y, además, la colección masculina se complementa con alpargatas y zapatillas que llegan hasta la talla 45.
La incursión de Lidl en el mundo de la moda no es algo nuevo ya que su andadura comenzó en el año 2016 cuando lanzó su propia marca de moda Esmara y con la que pretende conseguir ganarle cuota de mercado a Primark, uno de los principales gigantes de la moda low cost.
Lo que está claro es que Lidl ya se ha convertido en todo un referente en España, llegando incluso a ser la cadena de supermercados con el mayor número de fans en Facebook y haciendo que sus promociones sean muy seguidas por todos sus consumidores que incluso hacen colas antes de que abran el supermercado para hacerse con algunos de sus productos más codiciados (tal es el caso del robot de cocina que se ha convertido en toda una sensación y cada vez que sale a la venta una vez al año, pone a la gente a las puertas del supermercado de madrugada para adquirirlo).