Existen lujos de lujos y este no es para los que tienen hambre. Según describen en la web, en la que ya se han agotado las 100 cajas de esta costosa y limitada edición, no se trata de unas “papas fritas cualquiera” sino de unas que están “hechas con algunos de los más exclusivos ingredientes disponibles en los países nórdicos” y que combinan a la perfección con la marca de cerveza artesana que las ha creado.
Las caras papas fritas han sido lanzadas por la marca sueca de cerveza St Erik’s Brewery, después de que talentosos chefs del Swedish National Culinary Team participaran en esta edición que incluso viene con su documento de autenticidad, como puede verse en su website.
En este caso, todas las ganancias procedentes de esta venta, serán donadas a caridad. Pero no es el único ejemplo, la que sería la cerveza más cara del mundo, la Antarctic Nail Ale, se vende por más de 800 euros la botella, pues se busca recaudar fondos para la defensa y protección de las ballenas hecha con en una acción similar, pero para salvar ballenas y ha sido elaborada con agua procedente de un enorme trozo de hielo de la Antártida.