México, D.F.- Cada vez que se anuncia la sede que albergará los próximos Juegos Olímpicos, nace la curiosidad por saber cómo será la mascota que acompañará a esa edición.
La primera mascota olìmpica apareció en Grenoble 1968. Desde entonces, este símbolo se ha convertido en un elemento de gran importancia en el tema de merchandising y productos licenciados que se comercializan durante la realización de los juegos.
Te presentamos las mascotas que han acompañado a los Juegos Olímpicos desde 1968, las cuales -ya sean animales o figuras antropomórficas representativas de la sede olímpica o del mismo evento- otorgan un toque especial a cada edición.
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Mascotas veraniegas
Munich 1972. Waldi, un perro dachshund representativo de Baviera. Representaba la resistencia, tenacidad y agilidad de los atletas.
Montreal 1976. Amik, un castor, uno de los animales simbólicos de Canadá.
Moscú 1980. Misha, un oso. Fue diseñado por el dibujante de libros infantiles Víctor Chizikov. 
Los Ángeles 1984. Sam, un águila calva, símbolo nacional de los Estados Unidos. Diseñado por Robert Moore y Disney.
Seúl 1988. Hodori y Hosuni, dos tigres, animales comunes en las historias tradicionales y leyendas de Corea del Sur.
Barcelona 1992. Cobi, un perro humanizado. Diseñado por Javier Mariscal.
Atlanta 1996. Izzy, una mezcla de distintas figuras. Su nombre original era Whatizit (del inglés What is it?).
Sydney 2000. Olly, una cucaburra; Sid, un ornitorrinco; y Millie, un equidna. En esta edición apareció una mascota no oficial que se hizo muy popular gracias a un programa de TV: Fatso, el wombat.
Atenas 2004. Athenà y Phèvos, dos niños inspirados en dos muñecos de la antigua Grecia.
Pekín 2008. Beibei, un pez azul; Jingjing, un panda; Huanhuan, una antorcha roja; Yingying, un antílope tibetano; y Nini, una golondrina verde. Juntos conforman la frase Beijing huanying ni (Pekín te da la bienvenida).
Londres 2012. Wenlock, un muñeco de metal con líneas naranjas; y Mandeville, un muñeco de metal con líneas azules y fucsias. Se dice que fueron creados por uno de los constructores del estadio olímpico, quien al jubilarse decidió hacerlos para sus nietos.
Mascotas invernales
Grenoble 1968. Schuss, un esquiador.
Innsbruck 1976. Schneemandl, un muñeco de nieve.
Lake Placid 1980. Roni, el mapache.
Sarajevo 1984. Vuchko, el lobo. 
Calgary 1988. Howby y Hidy, los osos polares.
Albertville 1992. Magique, un hombre-estrella.
Lillehammer 1994. Haakon y Kristin, dos niños vestidos con trajes típicos de Noruega.
Nagano 1998. Sukki, Nokki, Lekki y Tsukki, cuatro crías de búho.
Salt Lake City 2002. Powder, el conejo de las nieves; Copper, el coyote; y Coal, el oso pardo.
Turín 2006. Neve, una bola de nieve humanizada; y Gliz, un cubo de hielo.
Vancouver 2010. Miga, un “oso marino”; Quatchi, un sasquatch; y Sumi, un espíritu guardián. Los acompaña Mukmuk, una marmota, que no es mascota oficial.
Sochi 2014. Las mascotas serán un oso polar, un conejo y un leopardo, cuyos nombres aún no se revelan.
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