Aaron Mickelson expone una tesis en donde propone desaparecer el packaging de los productos, pese a que estos sean un elemento distintivo de la compañía en el punto de venta gracias a vistosas envolturas que llegan a impulsar la compra de la mercancía.
De acuerdo con el sitio oficial del diseñador, cada año los americanos tiran alrededor de 140,000 mil millones de basura, la cual proviene de envolturas de diferentes marcas, por lo cual expone que llegó el momento de terminar con esto y ofrece medidas para hacerlo.
Pese a esto, el packaging es un elemento distintivo de las firmas comerciales, incluso se ha vuelto un factor de colección como es el caso de Coca Cola y las latas con el nombre. Si bien, un aspecto a su favor es que hace perdurable el producto, pese a que genere contaminación.
Ante el tema marcas como Puma, Sun Chips y Nescafé han optado por convertir sus envolturas en reutilizables, de forma que no causen mayor impacto en el medio ambiente, sobre el tema, conviene señalar que Citizen Engage enfatiza en que el 42 por ciento de los consumidores opta por adquirir productos que muestren su compromiso con la sociedad.
Aunado a esto, análisis de Nielsen Company revelan que el 77 por ciento de las personas en América Latina prefiere comprar productos que sean socialmente responsables, tema en donde la sustentabilidad es señalada por el 66 por ciento.
Al considerarlo, apostar por desaparecer el empaque se convierte en una medida arriesgada, pues le resta visibilidad a la compañía en el punto de venta, por lo cual elaborar éstos envoltorios de materia reciclable o biodegradable puede generar una mejora al medio ambiente.