El defensa central, capitán y referente de la Selección Mexicana de Futbol, Rafael Márquez, vive en el Mundial de Rusia, su quinta Copa del Mundo, lo que vuelve el hecho histórico; sin embargo, la estancia en el país parece todo menos placentera.

Diversos reportes de prensa, entre ellos New York Times y Le Monde, han relatado las medidas que toma la Federación Mexicana de Futbol con el káiser michoacano a fin de que no exista problema alguno con los patrocinadores de origen norteamericano, tanto del equipo tricolor, como de los que son parte de la familia de la FIFA.

Durante los últimos meses, el defensa mexicano ha dedicado sus esfuerzos para aclarar su situación legal luego de que el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos lo incluyera en su lista negra, tras presuntos nexos con el Cártel Jalisco Nueva Generación relacionados con lavado de dinero.

A pesar de que se desplegó un arduo trabajo legal para desvincular al mexicano de la organización criminal; las marcas han solicitado que uno de los jugadores más emblemáticos de México no use sus productos, y que incluso no esté cerca de algun logotipo en los estadios, hoteles y entrenamientos.

Según los trascendidos, Rafa Márquez no puede beber agua u otra bebida de botellas de alguna marca norteamericana; tampoco puede volar en una aerolínea de esa procedencia; esto llega a tal grado que en los hospedajes no puede estar cerca de inversionistas o vínculos con empresas estadounidenses.

A su vez, la FIFA también puso limitantes al libre andar del jugador, en caso de que Márquez esté presente en una rueda de prensa durante el Mundial, el moderador no puede ser estadounidense, tampoco puede ser entrevistado al terminar un partido, ya que los jugadores se colocan en una mica en la que se aprecian las firmas auspiciantes; Coca Cola, McDonald’s, Budweiser y Visa son de las marcas que aparecen en la mampara.

En los estadios, tampoco se le permite estar cerca a los logotipos gigantes de los patrocinadores. Y en caso de que sea elegido como el mejor jugador de un partido, premio que está a cargo por Budweiser y que se otorga mediante votaciones, seguramente no recibirá el distintivo ya que podría ser violada alguna de las prohibiciones a las que sujetó al jugador y a las marcas norteamericanas.

Por su parte, el branding personal de Márquez se incrementa a medida que se demuestra que puede más su dedicación y amor por el juego, ya que se dice que se negó a recibir pago por su participación en la justa. De tal modo que los últimos momentos del central, debido a su historia y palmares, debería de ser de otra forma; sin embargo, este asunto legal pesó más a la hora de la verdad.