Si de rosas y café se habla, siempre se piensa en Colombia, sin embargo el sector floricultor también a tenido que modificar sus estrategias de promoción, este tipo de productos tiene aún mayores restricciones a la hora de exportar, su vida útil también es un factor que juega en contra de una industria ,otro elemento relevante es sin duda la estacionalidad del producto que se vale de fechas relevantes y emotivas, y como no el soporte de este tipo de productos que deben contar con instrumentos validos desde la sostenibilidad; es así como este próximo 14 de febrero se celebrarán las fiestas de San Valentín, y para los floricultores colombianos es uno de los momentos del año en el que las exportaciones crecen considerablemente. Sin embargo, para acceder a los mercados internacionales, que en 2017 generaron US$785 millones para la misma época, es muy importante contar con un sello de floricultura sostenible.
En Colombia, 25 empresas floricultoras cuentan con el certificado Florverde Sustainable Flowers, una garantía con 20 años de existencia que avala la sostenibilidad en las fincas productoras, las cuales deben pasar por rigurosas evaluaciones para recibir el certificado de flores producidas responsablemente.
Algunas de estas compañías, como Agrícola El Cactus S.A., Agrícola El Redil S.A.S, C.I. Agromonte S.A., Ayurá y Silvestres, entre otras, validan su sostenibilidad en tres aspectos: social, económico y ambiental.
Esta prelación de factores involucra el modelo de promoción de los floricultores colombianos a la tendencia del Green marketing “recordemos que dentro de sus objetivos esta la modificación de productos, cambios a los procesos de producción, así como la modificación de la publicidad y el manejo responsable de sus empaques entre otros”.
Y es que en algunos de los circuitos más importantes exigen o privilegian compañías que tengan sello de sostenibilidad. “En Reino Unido se exige sello, Australia también. En Europa pesa, no es requisito pero entra más fácil, así como en el mercado japonés o estadounidense”, agrega José Antonio Restrepo, gerente y propietario de Ayurá.
Un marketing responsable al cual las empresas del sector en Colombia le apuestan para asegurar que su oferta de valor es AAA.