Las crisis suceden por recesiones, pandemias, desastres, guerra, todo aquello que afecte la producción de bienes, servicios y empleo, repercutiendo negativamente en el bienestar general de la población. Sin embargo, durante cualquier crisis se presentan oportunidades para el marketing. La pandemia por COVID-19 para nada fue la excepción, ya que hemos visto innumerables cambios en todo tipo de temas de marketing.
Aprovechando la crisis que estamos terminando de vivir, el marketing digital se ha hecho más presente a todo nivel. Innumerables cambios tecnológicos nos han impactado mucho más rápido de lo que se esperaba. Ejemplos los vemos en medios sociales digitales, ventas directas en internet, promociones digitales mediante influencers, entre muchos otros efectos que seguiremos viviendo. Las innovaciones, principalmente tecnológicas, en muchos casos han sido disruptivas más que simples mejoras de lo que existía. Todo esto pasa frente a nosotros y el marketing lo aprovecha para hacer más asequibles todo tipo de productos a los consumidores. Aquel que tarde en sumarse a la ola disruptiva queda muy pronto fuera. Aquel que se sume la tendencia sin crecer igual o más de lo que lo hace el mercado, será eventualmente sobrepasado por su competencia.
El concepto de economía digital es hoy mucho más prevalente que hace apenas dos o tres años. Dentro de esa economía digital se generan muchas industrias creativas, algunas bastante nuevas. Las industrias creativas son aquellas en las que tanto los gobiernos como el sector privado se involucran. Independientemente de la orientación del gobierno, dejar este tema de lado afecta el desarrollo de nuevos negocios que traen bienestar general. Una industria creativa puede ser tan amplia como se quiera, ya que puede cubrir todo el quehacer, desde producción hasta temas de desarrollo social. Lo relevante de este tipo de industrias es que aprovechan y explotan todo tipo de conocimiento e información disponible. Una industria creativa debe tener innovación como base para desarrollarse de forma disruptiva.
Una innovación disruptiva es aquella que se logra satisfaciendo las necesidades o deseos de los consumidores de una forma diferente o con un modelo de negocio atractivo o innovador. La industria de la música o la de películas y videos son ejemplos de industrias creativas. El éxito de muchas industrias creativas se ha destacado en los últimos 20 años, al aprovechar conocimiento e información. La digitalización de la economía impulsó mucho de su crecimiento hasta el 2020, cuando la pandemia la frenó de golpe. Sin embargo, la creatividad de muchos se destacó al adaptarse rápidamente.
Una crisis representa una oportunidad para innovar y destacarse. Los consumidores constantemente buscan productos y formas de satisfacer sus necesidades de mejor manera y con mejores beneficios. Las industrias de música y videos han evolucionado tanto durante este siglo que se modificaron completamente. iTunes, Spotify y Netflix pueden estar entre los primeros, pero existen otros muchos como Amazon Music, YouTube Music, Deezer o Tidal en música o Disney+, YouTube y Hulu entre otros muchos más en videos y películas.
Una gran innovación se ha dado con los supermercados, al desarrollar plataformas completas mediante las cuales puedes recibir abarrotes, frutas y verduras en casa. La pandemia provocó que UBER Grocery, DiDi, Soriana, WalMart, Amazon, Mercado Libre, Calii, Jüsto y muchos más entraran al mercado con mucha aceptación. Ahora el reto es mantenerse, algo que para nada parece fácil. Incluso en áreas específicas se ven modelos similares como el de Calimax en Baja California, con competencia nacional e internacional. Todos estos ejemplos buscan satisfacer al cliente con innovación disruptiva, utilizando tecnología y conocimiento mediante un modelo de negocio atractivo. La pandemia, como crisis, los empujó a ello para mantenerse y destacarse. Quedarse sin aprovechar cualquier crisis es contraproducente, ya que otros si lo harán.
Por: Dr. Jorge A. Wise, Profesor de Marketing y Negocios Internacionales de CETYS Universidad, miembro de la CETYS Graduate School of Business