Si bien el currículum vítae adecuado es fundamental para que el reclutador voltee su mirada a ti y que llegues a la entrevista de trabajo, existen detalles que a veces minimizamos pero que en realidad resultan vitales en el proceso.
La entrevista en sí es una etapa importante porque no sólo sirve para que te contraten, sino para que definas como profesional a qué estás dispuesto a llegar por un puesto laboral. Es decir, en la entrevista de trabajo te puedes dar cuenta de que a veces la remuneración o la industria que siempre quisiste, lo son todo para ti.
Recursos humanos no siempre es confiable o correcto, los profesionales pueden pasar por experiencias que redefinen sus objetivos o que conforman al final metas totalmente diferentes, pero firmes.
Sobre todo las generaciones como los millennials, tienen claro que no es más importante el dinero que las condiciones en un empleo, pero cada vez más generaciones son conscientes de esto.
En ocasiones, la persona incorrecta en la entrevista, no tiene la actitud o capacidad para determinar si eres un buen o mal elemento y si además te hace sentir incómodo, lo mejor es abandonar la entrevista y hacerle saber a RH tu sentir, puede ser que te den una entrevista ahora sí con la persona correcta o lo peor que puede suceder es que te descarten, pero sabrás que no es la empresa correcta.
Señales
Por ejemplo, cuando te ven de arriba a abajo por la forma en que vas vestido, cuando tú sabes que no es extravagante, pero aunque lo fuera, ningún entrevistador tiene derecho de hacerte sentir mal por tu elección de look, en ese momento te enteras que aunque te rechacen, saldrás ganando al alejarte de la empresa incorrecta.
También suele ocurrir que te venden un puesto de “x área” y al final te ofrecen algo muy distinto, eso es al final un engaño que seguramente te aplicarán en otras cosas porque se les hace “fácil”. Así que si te hacen sentir mal por no tener ciertas capacidades para entrar en el nuevo puesto que te ofrecen, al final sales ganando, alejándote de una compañía que engaña.
Otra pésima experiencia que te dice a gritos “es la empresa incorrecta” es cuando te dan detalles de tus actividades, pero les preguntas por el sueldo y de inmediato te dicen que eso te lo dirán más adelante en el proceso; date cuenta, sus intenciones son que te enganches con la vacante, pero seguramente el salario es bajo y quieren convencerte de que eso no es lo más importante, pero sí lo es. Es el trabajo incorrecto, ¡aléjate!
Te pueden rechazar por tener mucha experiencia y te dirán que quieren a alguien “fresco”, pero en realidad quieren mano de obra barata, alguien que por la experiencia esté dispuesto a darlo todo y no alguien que sepa cómo se manejan las cosas.
También el rechazo puede venir por ser ordenado incluso con los horarios, por querer que te dejen claro si pagan horas extra porque te dirán que necesitan “alguien que se apasione y comprometa con su carrera”, un disfraz de la explotación.