Las intenciones de la actual administración de Estados Unidos por retirar a la nación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) son contundentes. Ni La volatilidad de las monedas ni la postura de diversos agentes políticos y económicos parecen cambiar la posición de Donald Trump, quien argumenta que las condiciones actuales del acuerdo son, en más de un sentido, desfavorecedoras para la Unión Americana.
Lo cierto es que esto podría no ser del todo cierto. El valor del intercambio de productos resultado del TLCAN es en promedio de 2 mil 600 millones de dólares al día y aunque México ha tenido un incremento del 25.5 por ciento en las exportaciones que realiza desde 2010, los cambios y posibles rumbos del acuerdo son un factor que afecta el valor de la moneda nacional.
Al cierre del martes 17 de octubre, el dólar alcanzaba un valor de 19.03 pesos, 0.16 por ciento más caro que el día previo y nuevamente se especula que en los días venideros el dólar puede acercarse a los 20 pesos por unidad.
Con base en estimaciones realizadas por el Departamento de Investigación de Merca2.0, la inversión de los países socios del acuerdo hacia México durante 2017 presentará un decremento del 28.5 por ciento, impactando en las importaciones y generando inestabilidad a la moneda nacional. Recordemos que del total de las importaciones que realizan los Estados Unidos de sus socios del TLCAN, el 50.8 por ciento proviene de México. Aún considerando lo anterior, éstas importaciones desde el país han tenido un decremento del 2.7 por ciento con respecto al año anterior. A su vez México exporta en promedio el 97.2 por ciento de sus productos a Estados Unidos y el 2.8 por ciento restante a Canadá.
En esta línea es importante mencionar que desde 1994 –año en que dio inicio el acuerdo comercial- el crecimiento del Producto Interno Bruto del país se redujo de 4.73 por ciento a 2.3 por ciento, lo que refleja una economía cuya descripción se resume en un bajo crecimiento, deuda alta con alzas en inflación y una paridad igual de alta; el promedio del dólar en 2016 fue 2.8 pesos más alto que en 2015.
Es un hecho que México requiere de aliados para mantener su nivel de exportación y Estados Unidos es el jugador más importante para la economía nacional. Las cifras del 2017 podrían acercarse peligrosamente a las obtenidas en 2009 y 2010, una tendencia que de mantenerse durante el año electoral podría tener repercusiones importantes en la economía mexicana que debe responder ejerciendo los tratados que tiene con otros socios comerciales.