Los empleados incómodos por su forma tan amarga e irritable de ser, suelen ser repudiados por los demás miembros de la organización, porque difícilmente llegarán a socializar y encontrar puntos de interés que lleven a un acercamiento que permita una mejor conjunción dentro del equipo de trabajo.
Como parte de mi experiencia profesional, he llegado a detectar que las personas que son etiquetadas como amargadas, son empleados que trabajan de una manera muy eficiente y que los resultados que brindan a la empresa, son por encima de lo esperado, pero debido a su forma de ser, en muchas ocasiones vemos primero el lado negativo y es más fácil señalarlos que ayudarlos para que mejoren su actitud y con ello también su productividad y eficiencia de operación.
Por supuesto que para el área de Recursos Humanos, resultaría muy confortable que no existieran este tipo de personas dentro de la organización, pues se convierten en un dolor de cabeza y no le hallan la cuadratura al círculo para poder revertir la situación, que de por sí ya es complicada.
Algunas de las características que definen a un empleado amargado son las siguientes:
1. Nunca me toman en cuenta
La gente que presenta amargura, por lo general siente envidia y cultiva odio hacia sus demás compañeros, cuando no son ellos los elegidos para ser considerados en los incrementos salariales, para diversas promociones, para cursos de capacitación, para organizar diversas actividades de equipo o para cualquier tarea que ellos se consideran capaces de hacer aun cuando no tenga nada que ver con su actividad preponderante y se la pasan reclamando todo el tiempo de que no se les toma en cuenta para nada, por lo tanto, viven en una infelicidad total en el aspecto laboral que los frustra de manera constante y debido a esto, no disfrutan de sus tareas que les han sido asignadas. Su crítica por lo general es destructiva en lugar de construir en favor del equipo y de la empresa.
2. Todos los días son malos días
El estar todo el tiempo de malas es otro de los síntomas de un empleado amargado, pues sus problemas personales o patológicos que hayan tenido a través de su historia, los reflejan en su accionar de manera constante, pues al solicitarle tareas hay que hacerlo con gran tacto para no encender su mal humor y evitar sus malos gestos, berrinches y agresividad.
3. El negativismo su mayor cultura
Siempre le encuentran un sentido pesimista sobre las actividades laborales a realizar, van contra corriente, se quejan de todo y no le encuentran sentido de aprovechamiento a nada que se les presente. Por lo general a este tipo de personas nada les parece, pero al final terminan haciendo el trabajo que les corresponde de una manera eficiente, pero con un desgaste brutal por los conflictos que su mala actitud genera.
4. El mundo entero está en su contra
Todos me odian, todos están en contra mía, son frases frecuentes que identifican al empleado amargado, sienten que todo lo que hacen los demás es para perjudicarlos porque quieren estar en su puesto de trabajo, así que su mejor manera de conservar su posición será a través de victimizarse o tener una posición a la defensiva en todo momento.
5. Son poseedores de la verdad absoluta
Convencerlos de que están en un error, puede ser causa de una tremenda batalla, pues defienden a veces lo indefendible a capa y espada por sentirse los poseedores de la verdad absoluta y suprema. Si ellos no tienen la razón o las cosas no se hacen a su manera, será causa suficiente para que hagan berrinche y empiecen a aflorar sus malos modales.
Lo que debemos preguntarnos, después de haber leído este artículo, es saber si hemos hecho algo por este tipo de empleados, pues en ocasiones tan solo nos quedamos en la crítica hacia ellos como seres despreciables que no tendrían por qué estar en una empresa, cuando lo que deberíamos hacer es brindarles nuestro apoyo para que puedan modificar su conducta que está deteniendo su creatividad y su gusto por el trabajo. Debemos ofrecerles modelos a seguir con los que ellos se puedan identificar y que a su vez puedan imitarlos para que encuentren el camino de la felicidad y satisfacción laboral.