Entre los principales desafíos que enfrentan los profesionales del marketing quedaron plasmados en una proyección del sitio web especializado Statista, con base en cifras proporcionadas por HubSpot.
Los mercadólogos determinaron que generar tráfico y leads representa el mayor reto de todos, según el 61 por ciento de los encuestados. El segundo reto considerado el mayor es el Retorno de Inversión , con 39 por ciento y el tercero es asegurar un buen presupuesto, con 27 por ciento.
Retos y más retos para los estrategas, pero ninguna solución en el horizonte, al menos ninguna que el mercadólogo pueda percibir. Sin embargo, ante tanta tecnología y herramientas digitales, este no ve que las bases están frente a él como el camino a seguir.
Regresar a las bases de la mercadotecnia y sobre todo, a las propias bases de la estrategia, es clave para el éxito de las acciones digitales que emprenden las marcas. El caso del embudo del marketing nunca fue más vital que ahora en lo referente a digital.
Recordemos que el embudo engloba cuatro etapas fundamentales: anunciar, interesar, decisión y acción. Este proceso indica una forma precisa de formular una estrategia, la que el profesional está obligado a dominar.
La primera etapa se enfoca en que el estratega debe diseñar una solución a una necesidad del consumidor por medio del producto o servicio que promueve, algo que se ha olvidado en redes sociales ante el afán de concentrarse en contenido.
La segunda es una de las más importantes porque incluye un proceso por demás complicado, interactuar con el consumidor, la oportunidad de engancharlo. Esta parte es totalmente de redes sociales hoy en día, pero no hay que perder el foco de que no todo es sumarse a tendencia, muchas veces que no tiene que ver con los objetivos de marca.
La tercera es determinante porque corresponde al estratega cerrar lo que comenzó, con miras al objetivo de toda estrategia: la venta. Es el momento de decisión del consumidor. Finalmente, está la cuarta etapa, en ella hay que detectar una nueva necesidad y solucionarla, más aún, llevar al consumidor fuera del embudo y fidelizarlo al punto de que no necesite regresar al proceso para comprar.
Estas etapas van de la mano con las herramientas que ofrece digital, el medio con alcance masivo que permitirá oportunidades importantes a las estrategias. Se prevé que durante 2019, el 72,4 por ciento de la población mundial en línea pueda tener acceso a las redes sociales, lo que representaría un incremento del 69,6 por ciento si se compara con los números registrados durante el 2016.