La creatividad e innovación se expresan en múltiples formas y una reconocible es la solicitud de patentes sobre aquellas productos o inventos que realizan las empresas y que patentan para no ser imitados… o al menos para que ese proceso se vea retrasado y se conozca quien ha sido el autor original.
Las empresas que se muestran más prolíficas en este sentido son las tecnológicas, siendo la china Huawei la que lideró la solicitud de patentes en 2014 y que bajo el Tratado de Cooperación de Patentes han dato un total a nivel mundial de 214.500.
Según la World Intellectual Property Organization, de la cifra anterior, Huawei aplicó a 3.442 patentes, empresa a la que le sigue con considerable distancia la estadounidense fabricante de chips Qualcomm y su competidor chino ZTE con 2.409 y 2.179 aplicaciones respectivamente.
Por países, Estados Unidos es el que más aplicaciones de patentes reporta con 61.492 patentes the seguido de Japón (42.459) y China (25.539).
El Tratado de Cooperación de Patentes se estableció en 1970 y entró en vigencia en 1978. Su objetivo es facilitar la adquisición de patentes en múltiples regiones al mismo tiempo, dejando obsoletas las aplicaciones nacionales. Sin embargo, la decisión de garantizar éstas es una prerrogativa de las oficinas nacionales de patentes de los 148 estados miembros y los derechos de patente están limitados a las regiones en las cuales las patentes han sido garantizadas.