Este lunes se dio a conocer el promocional de la pelea entre Floyd Mayweather Jr. y el peleador de Artes Marciales Mixtas, Conor McGregor que se llevará a cabo en la arena T-Mobile de Las Vegas, Nevada, el próximo 26 de julio.
El material difundido por Showtime Boxing, la empresa encargada de organizar y promocionar el combate, lleva el título “Mi puño va a romper su cara” enumera los mejores momentos en las carreras de ambos deportistas.
Asimismo, se informó que el precio del pago por evento tendrá un costo de 99.95 dólares; se espera que sea el evento deportivo con mayor número de espectadores en este año.
El ganador en cuanto a impacto mediático de este anuncio fue Showtime Boxing, la promotora de la pelea registró 3 millones 197 mil 988 cuentas alcanzadas, al tiempo que generó 3 millones 750 mil 520 impresiones en Twitter, de acuerdo con datos de TweetReach.
En tanto, el pugilista solicitó a las autoridades tributarias de Estados Unidos una extensión de tiempo para poder pagar sus impuestos de 2015, hasta que se le otorgue la bolsa de la pelea con la estrella de la UFC, reportó el sitio Law360.
Se estima que Mayweather ganó una bolsa de 220 millones de dólares de su pelea contra Manny Pacquiao del pasado 2 de mayo de 2015, el boxeador compartió en redes una foto de un cheque por 100 millones, de la cual no se dedujeron impuestos.
El morbo por saber cuál de los dos peleadores perderá su condición de invicto es un ingrediente extra para que los aficionados sigan este evento deportivo, sin embargo, el hecho de que se trate de un pleito entre un boxeador y alguien ajeno a la disciplina demerita la función.
Por otra parte, el mal comportamiento de Mayweather, lejos de propiciar un castigo por parte de sus seguidores, es un atractivo que acompaña al púgil, son constantes las noticias en las que el peleador incumplió con algo, o es castigado por las autoridades; este tipo de noticias son aprovechadas por el boxeador para mantener el mayor tiempo que pueda su exposición ante los medios.