La aparición de maniquíes de extrema delgadez en una de las tiendas de la firma española Mango, ubicada en Barcelona, ha llevado a Nuria Lafuente a iniciar en la plataforma Change.org una campaña en la que “Pedimos a Mango que nos muestre a maniquíes con tallas de mujeres reales y no maniquíes que distorsionan de tal manera la realidad, pudiendo provocar una enfermedad tan grave como es la anorexia o la bulimia en muchas mujeres”.
La petición que ha sido titulada, “Mango, no más rebajas en las tallas de vuestros maniquíes”, pasa ya de las 90.000 firmas de las 150.000 que se ha propuesto recabar para que retiren estos maniquíes de los escaparates de sus establecimiento por ser “el reflejo de la extrema delgadez”.
Por su parte Mango ha contestado a la petición de Nuria Lafuente desde la propia plataforma Change.org para señalar que “los maniquíes con los que trabaja son un elemento artístico” al tiempo que se ha defendido explicando que los muñecos que utiliza visten talla 38 y que desde enero de 2014 cuenta con la línea Violeta by Mango donde ofrece tallas hasta la 54 para consumidoras que este rango.
La respuesta de Mango, ha llevado a la promotora de esta iniciativa, a poner en duda que dichos “elementos artísticos” estén ataviados con la talla 38, mientras ratifica su exigencia de maniquíes que muestren “una imagen saludable, una imagen de una mujer y de un hombre real, con las tallas más usadas por la mayoría de la población”.
A finales de 2015, una iniciativa similar de la joven de 17 años, Anna Riera, logró que los maniquíes ultradelgados que aun se usaban en algunas tiendas de Inditex, fuesen retirados por la empresa, después de recabar 111.716 firmas en Change.org.